Millones de estadounidenses se preparan este lunes para enfrentarse a un ola de frío récord en Nueva York, en el noreste y en el centro de Estados Unidos, donde un nuevo descenso de las temperaturas puede alcanzar los 51 grados centígrados negativos esta semana.

Esta ola de frío polar, sin precedentes en 20 años, con nieve y lluvia helada, ha causado al menos una docena de muertos en menos de una semana. Partió del norte de EEUU y del vecino Canadá, se extendió al centro del país e incluso amenaza de las regiones más meridionales como Tennessee y Alabama.

Las nevadas se esperan este lunes desde Misuri hasta ñla región de los Grandes Lagos, según los servicios meteorológicos de Estados Unidos. "Las temperaturas más frías en casi 20 años afectarán al norte y centro de los Estados Unidos a causa de un frente frío ártico", señalan en su página web: "Combinados con ráfagas de vientos, estas temperaturas pueden caer hasta niveles potencialmente letales, como los -51°C en ciertos lugares".

A estas temperaturas, pueden sufrirse lesiones cutáneas graves después de solo unos minutos de exposición, según recordaron las autoridades, que han llamado en repetidas ocasiones a la prudencia.

Miles de vuelos han sido retrasados ​​o cancelados este domingo en el aeropuerto de Chicago O'Hare Internacional, uno de los más activos, o en Nueva York el domingo. El aeropuerto neoyorquino John F. Kennedy fue cerrado durante dos horas el domingo por la mañana después de que un avión saliera de la pista a causa de la lluvia helada y la nieve.

En Colorado, un estado situado en el borde de la zona afectada por la zona de la ola de frío, murió una persona que iba a bordo de un avión privado que se estrelló durante el aterrizaje.

Lo peor está por venir, y docenas de récords de frío --algunos datan de hace casi 30 años-- podrían ser batidos este martes en el norte y el nordeste de Estados Unidos e incluso en algunas zonas del sureste.