En el marco de la Ley de Emergencia Agropecuaria declarada por el Gobierno provincial, el ministro de Desarrollo Productivo, Jorge Feijóo, se reunió ayer con algunos referentes cañeros para intentar evitar el retorno de las medidas de fuerza que por varios días convirtieron al interior de la provincia en un verdadero caos. Durante el conclave, el funcionario informó a los productores y cooperativistas cañeros el resultado de las gestiones que se realizaron tanto en Buenos Aires como en la provincia, de acuerdo a lo que había solicitado el sector.

La Ley de Emergencia, de Ingresos Brutos, fideicomiso de la Caja Popular, y préstamos rotativos para cooperativos son los puntos que, según el PE, ya han obtenido una resolución concreta en beneficio de pequeños productores cañeros.

Además, se comunicó que se realizó la presentación a nivel nacional por el compromiso que había asumido la Administración Federal de Ingresos Públicos (AFIP) con los productores, para suspender las intimaciones de cobro por 90 días.

Aunque desde el área de Desarrollo Productivo se mostraron conformes con los resultados obtenidos hasta el momento, dirigentes del Centro de Agricultores Cañeros de Tucumán (Cactu), de Cañeros Unidos del Este (CUE) y de la Sociedad Rural de Tucumán (SRT), aseguran que las gestiones no son suficientes y descreen de las promesas del PE.

En este contexto, este jueves se reunieron en Simoca, y en conjunto con dirigentes de otras actividades agrícolas, decidieron reactivar el plan de lucha a partir de la semana próxima. “Rechazamos la falta de respuesta de los gobiernos provincial y nacional ante la marcada crisis azucarera”, argumentaron.

Pero la crisis no sólo afecta a los productores cañeros. Es por eso que dirigentes agrarios, ruralistas de granos, y tabacaleros, que también se dieron cita ayer en Simoca, decidieron acoplarse a las movilizaciones a partir de la próxima semana, que incluirá un nuevo acampe en la plaza Independencia, en la capital tucumana.

Cabe recordar que los productores habían concedido una especie de tregua por 10 días, la cual finalizará durante el fin de semana, como muestra de buena fe en la espera de la puesta en vigencia de la Emergencia Agropecuaria provincial, mediante la cual el Gobierno se comprometía también a diferir por 180 días el pago del impuesto sobre los Ingresos Brutos y gestionar una moratoria de tributos nacionales para la actividad, así como también se había informado de una línea de crédito de $ 200 millones, a través del Banco de la Nación, con tasa subsidiada.

De no mediarse un nuevo consenso durante el fin de semana, los cañeros y productores agrarios en general retornarán a las rutas en el sur de la provincia y, en la capital, la plaza Independencia se volverá a adornar con el acampe de los productores.