Durante el próximo Año del Jubileo, que Francisco bautizó como Jubileo de la Misericordia y que se inicia en diciembre, todos los sacerdotes del mundo podrían absolver a las personas que, arrepentidas, confiesen este pecado ante ellos, una facultad hasta ahora reservada a los obispos. Ahora bien, ¿es realmente una novedad? ¿Significa esto que la Iglesia Católica cambia su posición respecto al aborto?
Para entender el alcance de este anuncio, Infobae consultó al padre Fabián Báez, párroco de María Reina en Villa
Urquiza (Capital
Federal), quien aclaró que, para el código de derecho canónico, "el pecado
del aborto es motivo de excomunión, una medida que debe ser levantada por la
autoridad de la diócesis, por el obispo; pero éste puede darles esta licencia a
algunos sacerdotes".
Precisamente, lo que acaba de anunciar el Papa es que durante el
año del Jubileo, todos
los sacerdotes podrán absolver de este pecado a las personas que estén
arrepentidas y acudan a ellos en confesión y en busca de perdón. No
será necesario remitirlas al obispo.
Existen otros delitos canónicos, que también tienen por pena la
excomunión –aclara Báez-, como la herejía, elcisma o revelar
el secreto de confesión. Este último es incluso considerado más grave y no puede ser absuelto ni siquiera por el
obispo, sino que debe intervenir la Santa Sede.
El padre Báez, que fue ordenado sacerdote en el año
2000 por Jorge Bergoglio,
celebra la decisión de Francisco, en línea con la misericordia que este Papa
predica constantemente. Y revela un dato poco difundido:en
Buenos Aires, todos los sacerdotes gozan ya de la autorización episcopal para
absolver ese pecado.
Lo más sorprendente es que la
medida fue tomada por el Arzobispo Antonio Quarracino,
antecesor de Jorge Bergoglio en la arquidiócesis de Buenos Aires, y al que la
opinión pública en general, y el progresismo en particular, consideraba
extremadamente conservador. La dispensa de Quarracino fue prolongada por Jorge
Bergoglio.
El amor sana, dice el padre Fabián Báez. "Pero para que
haya misericordia debe haber conciencia", aclara. No se trata de un cambio
de la posición de la Iglesia Católica respecto al aborto, que sigue siendo
considerado un pecado grave, sino una
medida que apunta a una mejor acogida en el seno de la Iglesia de las personas
que buscan perdón y consuelo.
En opinión de Andrés Beltramo, periodista del Vatican
Insider, el sitio especializado del diario
italiano La Stampa, esta decisión de Francisco implica de
hecho dejar sin efecto la excomunión en el caso del aborto, sin que deje de ser
considerado un pecado grave.
"La disposición del código canónico sobre el aborto puede
convertirse en un obstáculo para la reconciliación de personas que,
arrepentidas, confiesan un pecado grave, y no se sienten acogidas, porque el
sacerdote no puede absolverlas. De hecho quedan excomulgadas, y son remitidas
al obispo y puede empezar un camino burocrático que desanima a esa
persona", dice Beltramo, desde Roma, en diálogo telefónico con Infobae.
"Esto
que hizo el Papa no es algo novedoso -advierte-; en México por ejemplo durante
la semana del perdón, muchas diócesis aplican esta medida. Pero es la primera
vez que lo hace un Papa. Y tiene una lógica: se parte de la base de que las
personas, al momento de la confesión, ya dan un primer paso para enfrentarse al
problema. Y hay que tener en cuenta que es un momento de gran fragilidad de las
personas, por eso es importante que se sientan acogidas y no
desalentadas".
El código de derecho canónico actualmente vigente data de 1983.
Según Beltramo, se
aplicó la pena de excomunión al aborto para marcar que para la Iglesia se trata
de un pecado grave. Pero hace la precisión de que la excomunión no es una
"condena perpetua" sino que tiene por objeto "sanar", abrir
un período para que la persona "recapacite y cambie".
Ante la
consulta de si esto será provisorio –por el Año del Jubileo- o permanente,
Beltramo dice que es una decisión personal del Papa. Pero aclara que los Papas
pueden dar una dispensa y ésta, si no media reforma del Código canónico, sólo
estará vigente por el tiempo del papado en cuestión. En esta cuestión puntual la
misiva de Francisco especifica que tendrá validez durante el año que se
extienda el Jubileo, del 8 de diciembre de 2015 al 20 de noviembre 2016.
Él cree que en algún momento habrá una nueva reforma porque el artículo referido al aborto, el 1398, que dice:"Quien procura el aborto, si éste se produce, incurre en excomunión latae sententiae" (es decir, automática, sin juicio eclesiástico), puede ser ambiguo. Por ejemplo, un político que promueve la legalización del aborto, algo que puede tener consecuencias incluso más graves y extendidas que un caso individual, ¿queda incluido en la definición, si no procuró directamente un aborto efectivamente realizado? (Infobae.com)