El viejo cuartel se encontraba instalado en un predio prestado por el Club Belgrano en calle Marconi al 300. “Gracias a todos los que acompañaron en este proceso, en especial al Club Belgrano que nos permitió estar en sus instalaciones durante estos años y a los vecinos, que más que vecinos fueron nuestros amigos”, señaló Eduardo Figueroa, miembro del cuerpo de bomberos. Los pobladores que lindaban con el viejo cuartel, a modo de agradecimiento, realizaron el lunes pasado un acto para despedir a estos servidores públicos.

 En el lugar recordaron además a unos de sus fundadores don Ramón Flores, creador de esta prestigiosa institución. “Seguiremos trabajando con la misma pasión y vocación con el que siempre lo hicimos. Por cualquier emergencia nuestro número de teléfono sigue siendo 425252”, explicó Figueroa.

 Esta ONG, como otras de la provincia, se mantiene con subsidios que recibe del gobierno nacional y provincial, pero fundamentalmente cuenta con el apoyo solidario de la comunidad quienes les han brindado toda su confianza por la actividad constante que ellos desarrollan durante los 365 días del año, apagando incendios, realizando tareas de rescate y diariamente aportando asistencia emergencias en accidentes automovilísticos dentro de su zona de influencia.

 Actualmente la institución cuenta con un cuerpo de 31 bomberos entre hombres y mujeres, 2 autobombas, 1 unimog, 3 camionetas, equipos de trauma, de espuma y complementarios, rescate con cuerdas y herramientas varias, entre otros elementos. Además posee una escuela de cadetes que desarrollan actividades de prevención y recreación.