“El principal rol del Estado es cuidar cada puesto de trabajo de los tucumanos, por lo que se puso énfasis en destrabar este conflicto para que el ingenio esté activo en esta zafra”, dijo al respecto el gobernador Juan Manzur.
Con la articulación y el apoyo del Ejecutivo, en los próximos días se comenzará a poner a punto las instalaciones de la refinería para que los trapiches muelan este año.
La planta fabril se encuentra en la actualidad en un inadecuado estado edilicio, lo que demandará por parte del nuevo arrendatario una fuerte inversión en el corto y mediano plazo para que el funcionamiento sea óptimo.
Por último, trascendió que la deuda que se hizo cargo el Ejecutivo provincial fue previo a la firma del arrendamiento, lo que facilitó los medios para cumplir con el pago de lo adeudado por la anterior prestadora.