Martín Báez, el hijo del empresario Lázaro Báez, se presentó ante el juez Sebastián Casanello por la causa conocida como "la ruta del dinero K". Tal como estaba previsto y al igual que la última vez que estuvo ante el magistrado, presentó un escrito y no respondió preguntas.

A diferencia de su padre, el joven llegó a los tribunales de Comodoro Py en libertad. Está acusado de ser parte de una red dedicada a lavar dinero presuntamente proveniente de la obra pública.

Martín Báez ya se había presentado ante el juez el 6 de abril pasado, ocasión en la que se negó a responder preguntas y se limitó a presentar un escrito, tal como lo hizo su padre. Aseguró que desconoce el hecho que se le imputa, puso en duda la autenticidad de las imágenes en las que se lo ve contando dinero en la financiera SGI e indicó que los negocios de su padre alcanzan para justificar la cantidad de dinero que se ve en la filmación.

En la primera declaración, remarcó no saber de qué debía defenderse. "Lo digo porque tengo la seguridad de no haber cometido ningún hecho que implique la comisión del delito de legitimación de activos de origen ilícito durante toda mi vida", indicó en el escrito.

Esta semana, el fiscal Guillermo Marijuán se refirió al hijo de Lázaro y habló sobre los allanamientos que realizó en las propiedades del empresario en Santa Cruz. El fiscal de la causa aseguró que "mucha gente" le preguntó por qué no encarcelan preventivamente a Martín Báez para que "su padre y su madre declaren".

A esto, el representante del Ministerio Público Fiscal dijo que "no cree que el hijo tenga que ser detenido". Según dijo, "los testimonios de la causa de las personas que describieron los roles de cada uno –más allá de la titularidad de Martín Báez en la empresa- indican a su padre como la persona que daba las directivas. Casanello actuó correctamente, recibió un informe donde se indicaba que era el padre quien podía fugarse, y no el hijo", completó.