María, una de las hermanas que prestó declaración testimonial ante el juez Daniel Rafecas sostuvo que la noche del 14 de junio la Madre Alba, superiora en el convento de General Rodríguez, le había pedido que estuviera "atenta al portón" porque iba a ir "José".
Se refería a José López, el ex secretario de Obras Públicas del kirchnerismo que, esa madrugada intentó esconder casi u$s9 millones en el monasterio donde María estaba junto a otras 3 religiosas.
Todavía se espera la declaración de la "hermana Marcela". Antes de su presentación en los tribunales, Marcela dijo que fue ella junto con Inés las que estaban en el convento cuando el ex funcionario K llegó con los bolsos llenos de billetes y un arma semiautomática que dejó en el piso.
El juez Rafecas ordenó "blindar" el tercer piso de Comodoro Py para la indagatoria de las supuestas monjas. El magistrado dispuso un fuerte operativo de seguridad que incluyó un cambio de auto de las religiosas en el trayecto desde el convento hasta los tribunales. El traslado empezó con una camioneta Ford Ecosport y se completó un Chevrolet Corsa color negro.
La cuarta religiosa identificada, Celia Inés Aparicio, está citada a indagatoria para el 1° de agosto. Es ella la que ayudó a López a ocultar los bolsos, como lo demuestran las cámaras de seguridad del convento. IPROFESIONAL