Una decena de personas murieron en el tiroteo de este viernes en un centro comercial de la ciudad alemana de Múnich, en lo que la Policía definió como un "ataque terrorista", según citaron medios locales.

Imágenes de la televisión local mostraban un gran operativo de seguridad en las afueras del complejo para encontrar a los presuntos prófugos, aunque luego se confirmó que se trataba de un solo atacante.

El Departamento de Policía local explicó que el decimo cuerpo se encontró a más de un kilómetro de distancia y que "probablemente" es del agresor, que se suicidó al verse rodeado por los uniformados.

Según el rotativo Bild, el hombre corrió por el centro comercial, donde disparó a varias personas, antes de huir en dirección a una estación de metro. Fotos en las redes sociales revelaron el pánico en la zona, con personas corriendo para alejarse del lugar del tiroteo.

Las autoridades llamaron a evitar lugares públicos y durante varias horas fue cerrada la principal estación de tren y fueron suspendidos todos los servicios de transporte público de la ciudad.

Un empleada del centro comercial, identificada por el nombre de Sabiha, dijo a The Washington Post haber visto a un hombre abriendo fuego con lo que describió como un fusil de asalto y con algo parecido a un cinturón.

El ataque se produce cuatro días después de que un joven refugiado de 17 años hiriera a pasajeros en un tren en la región de Baviera, un hecho reivindicado por Estado Islámico.

Los incidentes en el país se registran, además, tras un ataque en Niza, Francia, en las celebraciones del Día de la Bastilla, en las que un tunecino que conducía un camión embistió a una multitud, matando a 84 personas. Estado Islámico también tomó responsabilidad por ese hecho.