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El Nación acuerda con Prat Gay una vía para pagar a obras sociales

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El banco estatal está al límite por los sucesivos préstamos que tomó el Tesoro. Las opciones para saldar una vieja deuda con las obras sociales sindicales de unos 30 mil millones de pesos.

Las urgencias fiscales del ministro de Hacienda, Alfonso Prat Gay, que no logra cerrar todavía las necesidades de financiamiento del 2016, se cruzaron en el Banco Nación con las demandas políticas de la Casa de Gobierno que quiere garantizarse paz social de los gremios.

El gobierno de Mauricio Macri se comprometió con los sindicatos a devolver los 30 mil millones de pesos de las obras sociales que están retenidos en el Banco Nación, desde que Cristina Kirchner entró en conflicto con Hugo Moyano. Se trata de dinero perteneciente al Fondo Solidario de Redistribución (FSR), un instrumento creado en 1989 por la Ley del Sistema Nacional del Seguro de Salud. A cambio de cumplir con ese histórico reclamo, la administración de Macri quiere que los gremios le garanticen paz social, en un año en el que la economía no ofrece buenas noticias para los trabajadores.

No parece casual que la negociación se abra en pleno proceso de reunificación de la CGT y mientras cecen las amenazas de los sidnicalistas de conovocar al primer paro nacional que podría enfrentar Macri. El problema es que FSR está depositado en la arcas del Banco Nación y representa aproximadamente en 8% del total de depósitos de esa institución. Si bien es verdad que se trata de fondos públicos si el Tesoro los retirara, el Nación rompería la relación técnica entre depósitos y préstamos que le marca el Banco Central en su resolución 76.

El Nación ya está al límte porque el Gobierno en estos siete meses apeló de manera recurrente a la institución para financiarse. Si se resquebrajara la relación técnica del banco que preside Carlos Melconian, el que sufriría es el sector privado y las provincias que lo utilizan para apalancarse, con el obvio efecto recesivo que esto tendría sobre la economía.

En todo el 2015, el Banco no llegó a ganar $20.000 millones. De manera que las opciones son simples: o el FSR o –por ejemplo- la línea de créditos para impulsar las economías regionales. En enero Melconian había asegurado la ampliación de los créditos para el interior en $3.000 millones. Este fue el argumento de peso que tanto el equipo de Carlos Melconian como el de Federico Sturzenegger le desarrollaron a la gente de Prat Gay.

Luego de la tensión lógica, la punta de un acuerdo empezó a encontrarse. La idea es constituir una fideicomiso con la mitad de los fondos para ir pagando por goteo a los sindicatos, en la medida que no se afecten las relaciones técnicas del Nación, explicaron las fuentes.

También se estudia la colocación de un bono, una operación poco usual en la historia del Banco Nación y el Tesoro se compometería a pagar préstamos a la institución por un monto similar al del fideicomiso, para evitar su desfinanciamiento. El acuerdo se complementaría con un pago incial de 2.750 millones de pesos a las obras sociales.