Sin embargo, la magistrada no adoptó por el momento ninguna medida para Tijera Insfrán.
En tanto, también hoy, se entregó en un escuadrón de Gendarmería Gustavo Muñoz, quien fue señalado como el dueño de la casa donde se cree que encajonaron los ladrillos de marihuana en el cargamento de zapallitos.
Además de Ávalos y Muñoz están detenidos en la causa el chofer del camión que trasladaba la droga y los otros seis hombres que ayudaban a realizar la carga del camión, mientras que la esposa de un hombre que intermedió en la compra del cargamento de zapallitos se presentó hoy en una sede de la Gendarmería y denunció haber recibido "amenazas de muerte" dirigidas a sus dos hijas menores de edad, sin embargo también quedó apresada.
El secuestro de la marihuana se produjo el sábado en la localidad formoseña de Laguna Naineck, en el noreste de la provincia y próxima a la frontera con Paraguay, a unos 45 kilómetros al oeste de la ciudad de Clorinda, donde personal de Gendarmería realizaba controles de rutina.
Según informaron las fuentes, los gendarmes detuvieron la marcha de un camión que entraba al país desde Paraguay transportando cajones con zapallitos y se dispusieron a inspeccionar el cargamento.
Durante la requisa, los efectivos descubrieron que entre las verduras habían sido escondidos gran cantidad de paquetes rectangulares o "ladrillos" de marihuana.
Al descargar y revisar todos los cajones, los efectivos contabilizaron un total de 3.729 paquetes de marihuana, con un peso de 2.542,99 kilos, y la sospecha es que el cargamento tenía como destino la provincia de Mendoza.TÉLAM