Las críticas del presidente Mauricio Macri, y el posterior consenso con la Corte Suprema de Justicia de la Nación para flexibilizar las condiciones laborales en el Poder Judicial, fueron recepcionados de muy mala manera por los trabajadores judiciales, que ayer realizaron un paro general para presionar a los vocales para que den marcha atrás con las reformas.

La iniciativa de la Corte, que busca satisfacer los reclamos del presidente, quien había cuestionado que la Justicia trabaja poco y “con privilegios”, pretende modificar el reglamento interno de la Justicia para eliminar la feria de julio, mover la de verano del 15 de diciembre al 15 de enero, ampliar la jornada de trabajo a ocho horas, correr el horario de atención y hacerlo de 9.30 a 15.30 (hoy es de 7.30 a 13.30) y restringir las "licencias especiales".

Para los trabajadores judiciales, en cambio, se trata de un intento de flexibilización laboral que lejos está de querer generar una mejora en las estructuras judiciales. “Es inaceptable que nos echen la culpa por tener derechos adquiridos. No tenemos privilegios, tenemos derechos como todos los trabajadores. Es un retroceso que no va a solucionar nada”, se quejó Marieta Urueña Russo, secretaria general del Sindicato de Trabajadores de la Justicia (Sitraju) en Tucumán.

“La mejor administración de justicia no pasa por avasallar los derechos de los trabajadores sino que viene de la mano de un mayor presupuesto, de mejores procesos. Hace mucho que venimos pidiendo que se aplique el nuevo código procesal penal. Hace mucho que venimos reclamando a la Corte que necesitamos más personal, que necesitamos que se nombren los jueces que hacen falta para poner en funciones los juzgados que no están operativos”, agregó.

En este último punto, citó el caso del Juzgado Federal Nº 3 en Tucumán, que obtuvo el visto bueno por el Congreso de la Nación y el Consejo de la Magistratura de la Nación en el año 2011, pero que aún no se concretó. “Necesitamos que se avance con el juzgado número 3 porque los otros juzgados están abarrotados de causas. Extender la jornada en dos horas más de trabajo no mejorará la atención, porque seguirán ingresando causas pero seguimos sin jueces que firmen los procesos. Hay un montón de cuestiones que hay que revisar para mejorar las condiciones de la Justicia pero lejos está de cargarle la responsabilidad a los trabajadores”, remarcó.

En nuestra provincia, la movilización que llevaron a cabo los judiciales en el Juzgado Federal (Congreso y Las Piedras), estuvo acompañada por otras organizaciones sindicales, múltiples organizaciones sociales y defensores de los DD.HH. Estos últimos, estallaron de bronca cuando el Gobierno Nacional presentó el proyecto que modificará el Ministerio Público Fiscal, eliminando las procuradurías especializadas. “Esto significará una pérdida de una política investigativa que es necesaria y que se traduce en una mejora en la seguridad de nuestra sociedad”, sostuvo Sara Mrad, titular de Madres de Plaza de Mayo en nuestra provincia.

“Es aberrante que quiera quieran eliminar las procuradurías especializadas. Por ejemplo, en Tucumán la Justicia Federal cuenta con fiscales especializados en Trata de Personas y Lesa Humanidad, áreas de renombre nacional por el importante avance de los casos y la multiplicidad de procesos ya concluidos en esos ámbitos”, remarcó.