“No va a haber opinión de los bloques, porque es un tema que atraviesa todos los bloques, donde hay diversas opiniones: favorables, por cuestiones fe o posturas ideológicas. En mi caso, no profeso ninguna religión pero tengo cuestiones éticas, y considero que hay que darle una respuesta del Estado a un problema que afecta a miles de mujeres, que por no tener recursos están en condiciones de vulnerabilidad, se encuentran al margen de la ley y se realizan abortos en condiciones sépticas, y pueden terminar en la muerte”.
De esta manera, la senadora nacional por Tucumán, Beatriz Mirkin, marcó en declaraciones a Radio Prensa su opinión respecto al candente debate sobre la despenalización del aborto que ya tiene media sanción de Diputados y sigue su curso en el ámbito de las comisiones en el Senado, hasta el 8 de agosto, cuando está prevista la histórica votación.
Durante la extensa entrevista en el programa Primerafuente Radio, la senadora y ex ministra de Desarrollo Social de la provincia durante la gestión de José Alperovich se expresó duramente respecto al tema del aborto. “Las mujeres no somos consideradas envases de fetos durante el embarazo, lo digo groseramente porque los que tenemos una opinión a favor del proyecto de despenalización del aborto que vino de Diputados, somos considerados abortistas. Bajo ningún punto de vista acepto esa opinión”, sostuvo.
“Voté todas las leyes que ayudan a la autonomía de la mujeres, como la del divorcio y de violencia de género. Así como los hombres son autónomos mientras la mujer está embarazada y hacen lo que se les da la gana y cuando no están embarazadas, también, entonces las mujeres tienen que tener un proyecto vital”, agregó la senadora alperovichista, quien participa de las audiencias en las que desfilan expositores a favor y en contra del proyecto que despenaliza el aborto que comenzaron esta semana en el Senado.
Mirkin también alertó sobre algunos puntos cuestionables del proyecto. “De Diputados salió un proyecto con algunas dificultades, tal vez un punto que Macri tenga que vetar es el que tiene que ver con la objeción de conciencia. Los médicos pueden tener objeción de conciencia, pero no las instituciones como dice el proyecto. Esto puede traer juicios por parte de instituciones sanitarias”,
En cuanto al destino de la discusión en el Senado, Mirkin detalló que hay tres posibilidades en la instancia de votación del proyecto: se lo aprueba tal como está, si se lo modifica tiene que volver a Diputados , o se vota por el no. “No hay otra posibilidad porque no hay otro proyecto”, acotó.
