Mientras se renueva la autoridad de PAMI Tucumán, con la inminente asunción de Graciela Lencina al frente de la delegación local en reemplazo del renunciante Alfredo Neme Sheij, jubilados realizaron una protesta en las instalaciones de la obra social para exigir la normalización de las prestaciones a más de 160 mil afiliados en toda la provincia.

Al malestar de los jubilados se sumaron empleados de la obra social, nucleados en el gremio de Sutepa, quienes realizaron una asamblea para reclamar que se normalice el funcionamiento de la obra social de los pasivos.

“Estamos siempre escuchando al afiliado para ir mejorando el servicio”, dijo Lencina, en declaraciones a Radio Prensa, quien pidió tiempo para interiorizarse de los problemas que actualmente afectan a los afiliados.

Desde los centros de jubilados, que en la provincia son alrededor de 164, vienen reclamando la urgente normalización de la obra social para que se garantice la atención de los abuelos y se asegure la entrega de medicamentos, entre otras dificultades.