Con duras críticas hacia sus dirigentes gremiales y las autoridades de la UNT, trabajadores no docentes autoconvocados realizaron una asamblea este martes en el patio del Rectorado (Ayacucho al 400), con el propósito de visibilizar su malestar y exigir respuestas a las irregularidades que aseguran que ocurren desde hace años en la Casa de Altos Estudios.

En este marco, son diversas las violaciones a la Carrera del personal universitario que denuncian desde el movimiento autoconvocado. Por un lado, advierten que la cúpula de APUNT, que encabeza Ángel Morales, propicia la designación de familiares y amigos en las categorías superiores, mientras desatiende las necesidades de los trabajadores. Por el otro, les recriminan a las autoridades de la UNT la precarización de decenas de trabajadores, bajo la mirada pasiva del gremio.

Según advierten, la situación no es nueva, se viene desarrollando consecutivamente desde hace muchos años. La gota que rebalsó el vaso en esta ocasión fue la reciente promoción de parientes de las autoridades gremiales. 

“Se ha vulnerado el derecho a la carrera de muchos no docentes. Muchos trabajadores están desde hace 10 años o más anclados en la categoría más baja. Nos hemos cansado de pedir la recategorización pero nadie nos da respuestas”, remarcó Silvina Rada, elegida como vocera de la asamblea.

Además de la recategorización, también reclaman el pase a planta de los trabajadores contratados y que se resuelva la situación de precariedad de los empleados que están "en negro".

"Tengo 10 años trabajando como odontóloga de ASPE (Acción Social para Estudiantes) en calidad de contratada. Hace años que vengo pidiendo que regularicen mi situación y no obtengo respuestas ni del Rectorado, ni mucho menos del gremio. Me duele que la Casa de Altos Estudios en donde yo me formé me precarice", remarcó Carolina Corbalán.

Por su parte, Natalia Leguizamón, quien está trabajando en calidad de monotribustista desde varios años, aseguró que son muchos los que se encuentran en su misma situación y que ante los reclamos, tanto el gremio como la UNT hace oídos sordos. "No tenemos ningún beneficio, ni obra social, ni aportes. Estamos cobrando entre $2 mil y $3 mil. Necesitamos que nos den una solución urgente", sentenció.