“Bolivia transita hoy en un momento de tristeza y de lucha. Es un pueblo maravilloso que se levantó contra siglos en los que fueron usados como servidumbre por la oligarquía que los gobernó. Hoy vemos una revancha clasista que fomentó este golpe”, explicó la historiadora a Radio Prensa. 

Klachko vinculó el ataque a la democracia en Bolivia a las expulsiones que se hicieron desde el gobierno de Morales a organismos y sectores de influencia neoliberal que representan al neocolonialismo y la los intereses de Estados Unidos en la región. 

“Hay mucha gente en Bolivia que está resistiendo y necesita en todo el apoyo de todo América latina. Todo esto sucede porque la oposición no perdonó las políticas de libertad y soberanía del Gobierno”, agregó la socióloga. 

Klachko también criticó el rol de los presidentes de países vecinos como Chile, Argentina, Perú y Brasil que negaron el espacio aéreo a Evo Morales en momentos del golpe. 

“No nos extraña lo que hizo Macri. Es hijo de la dictadura genocida  y del terrorismo de Estado que se enriqueció con la con la dictadura”, agregó. 

“Hay una situación de venganza, de terreno libre para perpetuar estas aberraciones. Hoy los militantes del MAS, el partido de Evo, corren riesgo. Hay una fuerte cuestión racista y clasista que está muy instaurada y tiene mucho que ver en este golpe”, concluyó la escritora.