Allegados a personas víctimas de la violencia policial se reunieron esta tarde en la sede de la Asociación de Prensa de Tucumán para analizar el estado de las causas judiciales. El encuentro fue coordinado por la Secretaría de Derechos Humanos de la Nación, que en Tucumán conduce Garmendia, y sirvió para analizar la situación de causas judiciales como la de Luis Espinoza y Ceferino Nadal, entre otras, en el marco de la violencia institucional y policial que se vive en la provincia.
Tras la reunión, el funcionario aclaró que uno de los ejes centrales de la gestión del nuevo secretario de Derechos Humanos, Horacio Pietragalla, es precisamente la resolución de la problemática de la violencia institucional y “es también el eje que hemos adoptado acá en Tucumán”.
En este sentido advirtió que “en las últimas dos semanas hemos tomado conocimiento de al menos un caso por día de violencia policial”. Además subrayó que el contexto de cuarentena condujo a situaciones propicias para el abuso policial. Por un lado, describió que al inicio de los controles para garantizar el cumplimiento del Aislamiento Social Preventivo y Obligatorio fueron muchas las denuncias por “coimas” que atendieron, motivo por el cual se debió reorganizar la actuación de las fuerzas de seguridad en un solo sitio para evitar esta situación. Por otro lado, subrayó que los casos de abuso de la fuerza en situaciones de detención fueron muchos durante la cuarentena más estricta. “Tenemos muchos casos de golpizas permanentes”, aseguró en diálogo con Radio Prensa.
En cuanto a los crímenes de Espinoza y Nadal, Garmendia consideró que “no se resuelve con arrestar a los policiales involucrados” porque “el problema va mucho más allá de ellos”. “Como sociedad aún no hemos terminado de visibilizar la gravedad y las causas de este problema como para ir atacándolas. Es un problemática muy profunda y preocupante. Venimos en un camino ascendente de violencia en la sociedad y la venimos naturalizando, lo cual es muy preocupante. El abuso de los policías forma parte también de este problema, que también se da en contra de los miembros de la fuerza”, remarcó y en este sentido añadió: “El caso del asesinato del cabo Lucena a manos de 4 menores de edad es una muestra de la violencia tremenda que tenemos en nuestra sociedad”.
Para Garmendia esta problemática merece una tarea profunda que se debe abordar desde diferentes áreas: “Por algún lugar debemos empezar a poner un poco de cordura, por algún lado tiene que comenzar. Lamentablemente no le veo ninguna salida en el corto plazo”, sentenció.
A su tiempo, Noemí Chabán, madre de Manuel Gallardo, uno de los presos fallecidos en el incendio en la Brigada Norte, adelantó que realizarán una presentación ante las autoridades provinciales “para que se nos informe que harán con todos los casos de gatillo fácil y cómo van a reestructurar la fuerza para que estas cosas no ocurran más”.
“Vemos que los 3 poderes no nos dan el lugar que nos corresponde como familiares de víctimas. El Estado es responsable. Por eso hemos iniciado esta comisión de víctimas de abusos policiales. Queremos ser escuchados, queremos ser tenidos en cuenta, que las instituciones no se olviden que a nuestros hijos y familiares los mataron. El Estado nos está abandonando”, sentenció.
