Al aire de Radio Prensa, Aguirre aclaró que el reclamo
docente no se trata de un capricho, sino que responde a que existen puntos del
protocolo aprobado a nivel nacional –rúbrica que también suscribió el ministro
Juan Pablo Lichtmajer- que son de imposible cumplimiento en la provincia. “Todos
saben los graves problemas de agua y electricidad que tenemos en la provincia.
La SAT hace agua por todas partes, tenés falta de personal de limpieza en las
escuelas, entre otros problemas. No están dadas las condiciones para volver”,
puntualizó.
Aunque aún no hubo una definición certera del gobierno sobre
la fecha de retorno, si bien se especula que puede ser durante la segunda
quincena de agosto, fueron varios los gremios que se expresaron en contra de un
hipotético retorno en las condiciones actuales. “Si garantizan las condiciones
óptimas podemos volver, pero como estamos ahora no podemos”, sostuvo el titular
de la UDT. “Hay muchas escuelas que fueron saqueadas durante este período, hay
que trabajar mucho para acondicionarlas y por parte del Ministerio de Educación
no hay ningún tipo de respuesta o reacción a nuestros pedidos”, agregó.
Otro punto que aseguró necesita ser atendido en forma
urgente es la condición laboral del docente en esta “nueva normalidad”. “¿Cómo
vamos a trabajar con la bimodalidad? Si una clase secundaria es de 40 minutos, ¿20
minutos serán presenciales y 20 minutos virtuales? No tenemos ninguna certeza
de nada”, subrayó.
Por último, Aguirre planteó que antes de regresar a las aulas se deben discutir paritarias. “En marzo debíamos discutir paritarias y no se lo hizo. Comenzamos la segunda parte del año y todavía no hemos discutido salarialmente. Los docentes han sufrido una pérdida de poder adquisitivo durante este periodo. Primero debemos definir lo salarial y cómo será el trabajo docente, como se ajustará a este retorno bimodal para que se garanticen los derechos”, sentenció.