A 3 años de la sanción de la norma homóloga en el Congreso de
la Nación, la legisladora Sandra Tirado presentó esta semana el proyecto de ley
de paridad de género en Tucumán, una iniciativa que apunta a garantizar la
igual participación de hombres y mujeres en los ámbitos de representación política.
“Esta ley busca generar los instrumentos legales para que
haya paridad en el armado de las listas, en forma alterna, para todos los
cargos electivos en todas las elecciones que haya en el ámbito local”, expresó
Tirado al aire de Radio Prensa.
De aprobarse el proyecto, las listas de postulantes a bancas
en la Legislatura provincial, los Concejos municipales y –en caso de ser
convocado- la Convención Constituyente, deberán confeccionarse ubicando a los
candidatos de manera intercalada entre mujeres y varones desde el/la primer/a
candidato/a titular hasta el/la último/a candidato/a suplente.
La ley se apoya en el principio de participación
equivalente por género, con fundamento en el marco básico de los derechos
humanos, siendo parte de las reivindicaciones del movimiento feminista.
Cabe recordar que la ley de paridad fue inaugurada en el
orden nacional en el 2017 y en los años siguientes fueron sancionando normas
similares las provincias de Chubut, Neuquén, Catamarca, Santa Cruz, Mendoza,
Misiones, Formosa, CABA y Chaco. Con anterioridad ya habían sancionado medidas
de igual índole las provincias de Santiago del Estero, Córdoba, y Río
Negro (2001-2002) y Buenos Aires, Salta y Chubut (2016).
Tucumán está entre las provincias que no cuentan con una ley
de paridad sino que tiene su propia ley de cupo femenino, que estipula que
solo el 30% de las listas deben estar integradas por mujeres.
Sin embargo, según un informe realizado en diciembre del
2019 por el colectivo Ojo Paritario, nunca en la historia legislativa ese
porcentaje se trasladó a la Cámara. Esto se debe –sostiene el informe- a que la
mayoría de las listas están encabezadas por varones, lo que sumado al sistema
electoral de los acoples, terminan obstruyendo el ingreso de mujeres. “Si hay
solamente, por ejemplo, tres cargos en juego y hay tres partidos políticos con
hombres a la cabeza, si bien pueden cumplir con el cupo femenino, las bancas
serán distribuidas a los tres varones”, agrega el documento.
Para graficar esto basta con ver las últimas 2
conformaciones de la Legislatura. El año pasado, en Tucumán se renovó la
totalidad de la legislatura provincial (49 bancas). Hasta ese recambio, había
11 mujeres (22,5%). En los comicios de junio del 2019 solo fueron electas 10
mujeres (20,4%). O sea hubo una reducción de la representación, y siempre por
debajo de 30%.
Por este motivo, Tirado consideró fundamental para avanzar
en la igualdad de representación que su proyecto sea respaldado por sus pares. “Es
una realidad que las mujeres tenemos menos posibilidades de llegar. No es un mero
discurso, está a la vista que los lugares de toma de decisión están ocupados mayoritariamente
por mujeres”, remarcó.
Adelantándose a las posibles críticas que la iniciativa puede recibir, sobre todo de algunos bloques legislativos que se han expresado abiertamente en contra de la perspectiva de género, Tirado manifestó que “son normas que generan cuestionamientos porque rompen con una estructura de muchos años y que interpelan a los partidos. Seguramente van a plantear que se debe llegar por mérito y no por una cuestión de cupo. Lo que tienen que entender es que por más mérito que hagan las mujeres, siempre nos cuesta más llegar. Estas leyes generan espacios de representatividad a las mujeres y vienen a solucionar asimetrías históricas”.