En la oportunidad, los abogados y abogadas de la familia
de Javier Chocobar, Andrés Mamani y Emilio Mamani, volvieron
a exigir que se fije fecha de inicio del juicio por el asesinato de Chocobar,
que murió en octubre del 2009 en Trancas, a manos de policías. “Aprovechamos la
oportunidad para poner en evidencia que a pesar de que tenemos una legislación
que protege a los pueblo indígenas, todos los días se están vulnerando sus
derechos y el caso Chocobar es una prueba de eso. Por eso venimos una vez más a
exigir que se fije fecha para el juicio oral”, comentó Belén Leguizamón,
abogada de Andhes y querellante en la causa.
El comunero Javier Chocobar (68 años) fue asesinado el 12 de octubre
de 2009, en la Comunidad Indígena Los Chuschagasta (Trancas,
Tucumán). En el mismo hecho 3 personas más son heridas, entre ellas Andrés
Mamaní de gravedad. Según detalla la instrucción, Javier y Andrés fueron
víctimas de un ataque realizado por el terrateniente Darío Amín junto
con dos ex policías: Humberto “el niño” Gómez (vinculado al comando
parapolicial Atila del malevo Ferreyra) y José Valdivieso. Los imputados
habrían llegaron al lugar -que Amín reclama que sería propiedad de su familia-
e hicieron disparos de armas de fuego contra la gente que defendía su
territorio en forma pacífica.
Desde aquel trágico día pasaron más de 6 años y medio, y todavía
no se fijó fecha para el debate oral, a pesar de que ya está constituido el
tribunal y ya se hizo la citación a juicio en el mes de octubre de 2014. En
este sentido, para Leguizamón “ya no hay excusas para la demora, ya se respondieron
y se desestimaron todos los recursos de nulidad que había presentado la
defensa, con claros fines dilatorios, como lo venimos sosteniendo”. El juicio
está en la Cámara Penal sala IV, y los jueces definidos para entender
son: Wendy Kassar, Emilio Paez de la Torre y Néstor Rafael
Macoritto.
Para Andrés Mamani, Cacique de la Comunidad Indígena Los
Chuschagasta (Trancas, Tucumán), “es una muestra de total impunidad que no
se lleva adelante este juicio”. “Son 6 años ya, y con todas las pruebas que hay,
que no se lleve adelante el juicio es algo que uno no entiende. La justicia
parece que mira otra lado”, agregó.
Por su parte, para el Dr. Pablo Gargiulo, representante de Mamaní, la demora del juicio es “intrínseca” al poder Judicial. “No existen razones jurídicas válidas para seguir postergando el inicio del juicio. Si examinamos las causas penales, evidentemente se nota una mora en su tramitación y se demora mucho en llegar a juicio. Los jueces de la Cámara -a cargo de la causa- fueron muy laxos al momento de evaluar los planteos de la defensa que para nosotros eran netamente dilatorios. Pero ya resueltos todos los planteos no hay motivos para evitar que se avance con el juicio”, sentenció.