Desde la Justica federal señalaron que “Hasta la fecha no se pudo confirmar la existencia de dicha fosa". La pesquisa se inició a partir de testimonios de personas que indicaron la posible ubicación.

En el Pozo de Vargas ya se habían encontraron restos de ciudadanos víctimas de la represión en épocas de la dictadura militar y, oportunamente, fueron entregados a los familiares para su debida sepultura. En base a esos objetivos se han dispuesto diversas medidas probatorias: georadar, sondeos exploratorios, intervención directa en la zona con maquinaria, tareas estas a cargo de equipos técnicos como el Equipo Argentino de Antropología Forense.

El Ministerio Público pidió a la ciudadanía que “ante la difusión por redes sociales y whatsapp de mensajes vinculados a dicha labor, la información de este tipo de cuestiones sea reservada y, en el mejor de los casos, chequeada en la Procuraduría de Crímenes contra la Humanidad, sección Tucumán, ante la gran expectativa y ansiedad que genera entre los familiares de víctimas”.

Cabe señalar que el Pozo de Vargas, de unos treinta metros de profundidad, está situado en una finca del departamento de Tafí Viejo, sobre la avenida Francisco de Aguirre al 4500, a unos seis kilómetros del centro de San Miguel de Tucumán.