El legislador Ricardo Bussi será denunciado ante el INADI por sus declaraciones en torno al cupo laboral trans, un proyecto que el líder de Fuerza Republicana rechaza por considerar que es “prepotente” y “autoritario” incorporar “a la fuerza” a personas trans en la administración pública. “El autoritario proyecto de –José María- Canelada, -Norma- Reyes Elías y –Federico- Masso no contempla contratar según capacidad sino conteste la preferencia sexual, en detrimento de las personas heterosexuales que ahora ven disminuidas sus posibilidades laborales por no incurrir en el travestisismo o fetiches eróticos análogos”, había expresado el hijo del genocida Antonio Domingo Bussi en diálogo con La Gaceta.

Para las organizaciones MuMaLá y Libres y Diverses, desde donde vienen pujando durante años por la sanción de esta normativa, los fundamentos de Bussi “no solo son aberrantes y discriminatorios, sino que además revelan el desconocimiento primero de marcos legales nacionales e internacionales vigentes en nuestro país y también de la lucha que ha llevado adelante el colectivo LGBTIQ+ en general y el colectivo travesti-trans en particular, en la visibilización y conquista de derechos”.

En este marco, subrayaron que “varios municipios y la provincia de Buenos Aires, Santa Fe, Chaco, Rio Negro y Chubut cuentan con la aprobación del cupo laboral trans, que se traduce concretamente en generar oportunidades para un sector tan vulnerable de nuestra sociedad”.

Por su parte, el legislador Federico Masso tildó las declaraciones de Bussi de “retrógradas, discriminatorias y persecutorias”. “Tratar al travestismo de fetiche erótico es aberrante y va contra las leyes que reconocen la identidad de género como un derecho", expresó a través de su cuenta de Twitter. "Como siempre Bussi en el siglo XIX. El rol del Estado es compensar las desigualdades de la sociedad apoyando a quienes lo necesitan hasta que esos sectores se incorporen plenamente y sin discriminaciones, en este caso, al ámbito laboral", agrega en una publicación siguiente.

¿Por qué un cupo laboral trans?

El proyecto no es nuevo. Se trata de la revalidación de los intentos de generar una normativa que estipula que se reserve una cantidad de puestos de trabajo igual al 1% de la totalidad de la planta estatal. En 2017 estuvo cerca de tratarse en la Legislatura, en ese entonces con otra conformación, pero finalmente se suspendió su debate. Por diversos motivos, en los 2 años subsiguientes no se logró el consenso suficiente para aprobarlo.

La iniciativa se argumenta en la necesidad de brindar garantías de igualdad de oportunidades para una comunidad que padece como nadie la exclusión, la discriminación y la marginalidad. De hecho, el 98% de las personas travestis, transexuales y transgéneros no tiene un trabajo formal en Argentina. Además, para el 80% de esta población el promedio de vida es de 35 años y mucho tiene que ver en esto la exclusión social y laboral que provocaron que la prostitución se haya convertido lamentablemente en la salida laboral- muchas veces la única- más común.