Alberto Fernández lanzará este jueves el programa Argentina Hace, un plan de obras públicas para generación de empleo: será una inversión de 8.500 millones de pesos para generar 20 mil puestos de trabajo.

Los funcionarios lo presentan, de manera informal, como una suerte de micro new deal criollo, aquel programa que el presidente de Estados Unidos Franklin D. Roosevelt lanzó durante la "gran depresión" de los años '30.

Es una comparación del formato no de la dimensión: en clave keynesianismo, la tesis de que la obra pública genera empleo que, a su vez, activar el consumo y de ese modo se mueve la economía. En una escala muchísimo menor, en la Casa Rosada apuntan a ese mecanismo.

El plan supone La generación de obras públicas de pequeña y mediana envergadura pero que demandan mucha mano de obra. Es una doble apuesta, según explican en gobierno: "Hacer obras necesarias para la gente y a la vez generar trabajo".

"Es un plan de reactivación de obras públicas para extender federalmente la red de agua potable y saneamiento, mejorar las rutas y la infraestructura hidráulica de ciudades" apunta la explicación oficial.

En la misma línea, se sostiene que "generará 20.000 nuevos puestos de trabajo, con mano de obra local, capacitación en oficios y respetando la paridad de género"