Centenares de aficionados no sólo fueron a recibirlo al ex aeropuerto Benjamín Matienzo; hicieron guardia frente al hotel donde se alojaron para ver a "la perla negra". Y también a sus no menos famosos compañeros: los campeones mundiales Mauro, Orlando -jugó en Boca- y Zito; el arquero Gilmar, los punteros Dorval y Pepe; el compadre futbolístico de "O Rei", el centro atacante Coutinho, y el zaguero Carlos Alberto, entre otros.
Un gran impacto tuvo también la visita de Pelé al Hospital de Niños.
El partido entre los brasileños y un combinado integrado por jugadores de San Martín y Atlético -reforzado- se jugó en el estadio "decano".
Hubo casi 18.000 espectadores y una recaudación récord: 8 millones de pesos. La magia de Pelé apareció de a ratos. Fue bien marcado por Juan de la Cruz Kairuz.
Claro que no lo suficiente como para impedir que anotara el segundo gol y estableciera el resultado final, 2 a 0, a favor de Santos FC.
En esa época Santos era el equipo de club con mayor prestigio en el mundo. Realizaba giras internacionales que le demandaban jugar hasta tres partidos por semana, lo cual repercutía en el estado físico de los integrantes del plantel.