El "arrepentido" Mario Pontaquarto pidió este jueves su absolución en el juicio por los sobornos en el Senado durante el gobierno de La Alianza al considerar que la acusación no pudo dar por acreditado con "prueba suficiente" el hecho que se investiga y en el cual él tuvo una activa participación a partir de su relato.
Para la defensa, a cargo del abogado Hugo Wortman Jofre, no se pudo probar de dónde salieron los 5 millones de pesos de la coima, más allá de que siempre se sospechó que salieron de la SIDE.
Lo mismo observó el abogado sobre la reunión en Casa Rosada en donde el entonces presidente Fernando de la Rúa habría ordenado emprender la maniobra. Ese encuentro, según el propio relato de Pontaquarto, fue donde ante las trabas en avanzar en la votación de la ley de reforma laboral en el Congreso el entonces Presidente dijo: "Eso háblenlo con Fernando de Santibañes", poniendo así en marcha la maniobra del pago de sobornos.
Para la defensa no fueron contundentes –como sí se valoró en la investigación– los entrecruzamientos telefónicos y un informe pericial que da la ubicación de cada uno de los acusados y que coincidía con el relato del "arrepentido".
Se trató de un alegato inesperado, al menos para las demás partes, que lo consideraron funcional para el resto de los acusados y en momentos en que se define el juicio que se inició hace un año y a 12 años de iniciada la investigación.
"La confesión de mi asistido no ha contado con el marco probatorio suficiente, no se han corroborado las probanzas para una condena", dijo Wortman Jofre ante el Tribunal Oral Federal 3.
En ese sentido, aseguró que "el relato no es una prueba en sí mismo" aunque aclaró que "no significa que haya sido mendaz" Pontaquarto, sino que en cambio él "siempre sostuvo la verdad".
En otro tramo de su alegato, la defensa del ex secretario Parlamentario criticó el funcionamiento de la Justicia en investigar hechos de corrupción, y refirió que "no se cuenta con avances tecnológicos", que aún perdura "normativa de 1921" y que "es un sistema no funcional y anacrónico" que termina por "garantizar la impunidad".
"Lo que falla es el sistema de enjuiciamiento de este delito, se puso énfasis en evidencia que no pudo ser corroborada", agregó en el juicio que seguirá el próximo martes con el alegato de la defensa del ex presidente Fernando de la Rúa, principal imputado.
Además, criticó la "tardía" inclusión de Pontaquarto en el programa de protección de testigos y aseguró que él "merece un reconocimiento".
Wortman Jofre pidió su absolución al no poder acreditarse el hecho o eventualmente la prescripción por el paso del tiempo de la causa. Además, en caso de haber condena reclamó que se lo exima de la misma o se la atenúe por su rol de cooperador.