Al despertar el 12 de enero de 2000, los tucumanos se quedaron atónitos con una noticia que selló el dolor en decenas de familias que perdieron a sus seres queridos en el que se convirtió el accidente más trágico protagonizado por turistas argentinos, en la historia de Santa Catarina, Brasil.
Este domingo se cumplen 14 años de la “tragedia de Camboriú”, cuando 40 tucumanos resultaron muertos por el brutal choque en un micro de larga distancia de la empresa “Giménez Viajes” y otro de una firma brasilera. La lista de víctimas sigue con dos brasileños muertos, y unos cuarenta y cinco personas heridas.
El accidente ocurrido en plenas vacaciones veraniegas del 2000 provocó gran conmoción en todo el país, al punto que el Gobierno argentino, a cargo entonces de Fernando De la Rúa, dispuso los aviones Tango 01 y Tango 02 para que los familiares de las víctimas pudieran viajar hasta el lugar del accidente para reconocer los cuerpos.
En esas naves aéreas, los familiares volvieron a la provincia con los cuerpos, que fueron velados en forma masiva en el Predio Ferial, ubicado en la zona de El Bajo. El chofer del micro tucumano fue condenado por la Justicia brasileña a siete años y diez meses de prisión en suspenso.