Nuevamente la industria madre de Tucumán vuelve a ser noticia,
aunque lamentablemente es por la situación complicada que viven los
trabajadores del sector. En esta ocasión, se trata de los obreros del ingenio
Concepción, quienes denuncian que la empresa volvió a atrasarse en el pago de
los salarios. En diciembre del 2018 habían realizado una toma pacífica de la
fábrica para reclamar por una situación similar.
Según denunciaron esta mañana, la empresa debía abonar el
pasado 20 de marzo pero hasta el momento no lograron percibir sus salarios.
Ante esta situación, decidieron declararse en paro, en tanto esperan respuestas
del grupo Luque, propietarios del ingenio.
En semanas anteriores fueron los obreros del Ingenio Santa
Bárbara quienes denunciaban la falta de pago de sus salarios y expresaban su preocupación
por la falta de garantías para que se realice la zafra 2019. Durante semanas
los trabajadores de la fábrica ubicada en el sur de la provincia cortaron rutas
y hasta llegaron a tomar la planta azucarera para reclamar por sus salarios.
A esto se suma la situación de los obreros del ingenio San Juan, que por un
conflicto judicial vienen padeciendo el atraso de sus salarios desde hace
varios años. La situación de esta fábrica es quizás la más preocupante. En menos
de una década cambió varias veces de mano y todos los que se hicieron cargo se
despidieron acusando problemas económicos y adeudando cifras millonarias a sus
empleados.
Por otro lado, a fines del 2018, unos 250 trabajadores
quemaron cubiertas frente a los portones del ingenio Marapa reclamando el pago
de los salarios que se les adeudaba desde el mes de septiembre.
Si bien, esas situaciones se fueron resolviendo,
intervención del Estado de por medio, por diferentes motivos tienden a
repetirse prácticamente todos los años.
En el mismo sentido, desde la FOTIA señalaron que la mitad de las fábricas tucumanas cerraron la campaña azucarera del año pasado con muchas dificultades. También los cañeros aseguraron que la situación es crítica y recientemente pidieron al Gobierno un incentivo económico para garantizar la producción 2019.