Gendarmería Nacional luego de una extensa investigación demostró la contaminación de la empaquetadora de cítricos “Pablo José́ Padilla”, al no haber una planta de tratamiento de los efluentes que son producto del lavado de limones, como el agregado de otros compuestos químicos.
La sentencia de la Justicia Federal rechaza además, todos los planteos de nulidad a las pruebas periciales. La causa se inició con la denuncia de una vecina de la citrícola, ubicada en Camino del Perú km 3,5 en Cevil Redondo (Yerba Buena)./elliberal.com