Las mujeres de prensa formaron parte de la Comisión de Mujeres y Medios de Comunicación, en el marco del 1° Encuentro de Mujeres del Frente de Todos que se desarrolla desde esta mañana en la sede del Partido Justicialista (Virgen de la Merced 157, en la capital tucumana). En la oportunidad, expusieron sobre el Protocolo de Actuación en Casos de Violencia Laboral, que construyó la APT tras arduos meses de trabajo y que se gestó en el seno de la Comisión de Mujeres de Prensa.
El documento, que sirve como herramienta para todas las
mujeres que padecen o padecieron cualquier tipo de violencia en el ámbito de
los medios de comunicación, fue respaldado por las diferentes organizaciones y
mujeres que participaron del encuentro, que además suscribieron al planteo de
las mujeres de la APT de visibilizar todas las situaciones de violencia que se
registran en la tarea periodística.
Por otro lado, la Comisión definió avanzar en la creación de
un observatorio de comunicación popular con perspectiva de género y exigir a
los gobiernos que los medios tengan como requisito para acceder a la pauta
publicitaria oficial capacitaciones en cuestiones de género y diversidad.
Al momento de exponer, Cinthya Otrera, secretaria de la APT,
recordó que el caso detonante que motivó el protocolo fue el de Giselle Salica,
la locutora que denunció el año pasado a dos compañeros que la sometieron
durante años a malos tratos y a acoso sexual y laboral.
Cabe recordar que luego de que saliera a la luz, varias
mujeres periodistas dejaron trascender que Giselle no es la primera trabajadora
de prensa en ser sometida a situaciones de este tipo y, más grave aún, que la
misma conducta se repite constantemente en diferentes medios de la provincia.
En este marco, en el seno de la Comisión de Mujeres de la
APT, nació el protocolo de actuación en casos de violencia de género, una
herramienta que esperan sirva para orientar a las trabajadoras de prensa sobre
cómo actuar en los casos en que sufran cualquier tipo de violencia en carne
propia.
En cuanto al detalle, Otrera aclaró que se trata de un
mecanismo directo que facilita a las mujeres realizar la denuncia y que
establece el acompañamiento a las víctimas durante todo el proceso. Según está
expresado en la normativa, el primer paso para las víctimas es realizar la
denuncia en la Fiscalía de Género de turno, para lo cual contarán con el
acompañamiento de la Defensoría Oficial especializada en género. A partir de la
confección de ese expediente, las víctimas deberán contar con todas las medidas
de protección necesarias para su resguardo durante todo el proceso penal.
El protocolo está basado en la ley nacional Nº 26485 (de Violencia de Género) y la ley provincial Nº 8336, de adhesión a la norma nacional, y engloba en 11 artículos todas las formas de violencia institucional, laboral y mediática, y establece los pasos a seguir por las víctimas, así como las garantías con las que deben contar.