Inicio / Sociedad / TRATA DE PERSONAS

El duro relato de una de las víctimas del proxeneta Gambande

- -
Impresionante testimonio de una muejer que estuvo años en cautiverio y en la prostitución. Ampliar
Una de las mujeres, víctima de la trata ejercida por el empresario Luis Roberto Gambande, condenado por la justicia relató a través de una carta lo que vivió y sufrió en su cautiverio. Dolor y esperanza de volver a vivir en libertad.
Señores jueces, Señora jueza:

Ante nada quiero agradecerles personalmente por el respeto y empatía con la que me sentí tratada, agradecer al Ministerio Publico Fiscal, a la Protex y a la Fundación María de los Ángeles Verón por el cuidado hacia mi persona pero sobre todo al Programa Nacional de Rescate y Asistencia a las Victimas por toda la contención, acompañamiento y Asistencia brindada, quizás suene extraño agradecerlo, pero desgraciadamente las víctimas no siempre tenemos el trato, acompañamiento y asistencia adecuadas.

Dicho esto, quisiera decir unas palabras de lo que impacta la Trata de Personas y en particular lo vivido con el acusado:  Con 16 años llegue a Tucumán, venia de Salta que todavía era un pueblo, llena de incertidumbres y enojos por sentir que las propias personas que decían amarme me ocultaron lo más valioso que es la identidad. Empecé mi tercer año de secundaria  viviendo con mis hermanos, creyendo que en la distancia  iba a conseguir respuestas, pase de salir de jugar de la vereda de mi casa a conocer Tucumán un lugar lleno de estudiantes y diversión, para mí todo totalmente desconocido. Deslumbrada por tanta gente diversa y con otro ritmo de vida, luces, pub, boliches; todo desconocido para mí. Pero tuve la desgracia de conocer dos demonios con distintas características, Ángel Ale y vos.

Luis Roberto Gambande, fuiste mi refugio y mi familia por 16 años, todavía lucho por el cariño tan profundo que siempre te tuve y todavía veo las fotos de años atrás y no puedo creer a ver estado tan sola y ciega, porque  no tan solo te aprovechaste de todas mis vulnerabilidades, exponiendo así mi integridad física miles de veces, y no tan solo por el peligro de enfermedades de transmisión sexual o por los golpes que recibí para consentir una violación paga, o los objetos que tuve que introducir en mi cuerpo por tus consejos,  sino porque me enseñaste que el amor era sometimiento, sumisión y violación ; creyendo que el sexo tenía que ser una película pornográfica porque mientras sea mejor en la cama, mejor me iba a ir. Construiste de mí una prostituta a tu antojo. Hoy no se amar, no sé lo que es una caricia verdadera o que me respeten por lo que soy y no por lo que es mi cuerpo.

Me privaste de ver mis hijos crecer, de ver sus primeros pasos, o ver cuando se les cayó su primer diente, disfrutar con alegría de sus logros escolares o simplemente estar ahí cuando se enfermaban, navidades, años nuevos porque ante todo estaba el trabajo, me convenciste de que lo que me hacías era trabajo, y quizás mi cabeza lo acepto para no sentirme sucia e indigna, porque viví 16 años avergonzada inventando trabajos que jamás tuve. Me robaste el poder educarme, y me desvalorizaste tanto que después de haber salido del infierno lloraba con ataques de pánico creyéndome incapaz de poder realizar cualquier otro trabajo. Vi llorar a mis hijos de hambre miles de veces o tuve que salir a vender mi cuerpo por remedios mientras vos te dabas todos los lujos, siendo madre por horas y dejando la crianza de mis hijos en mano de mi hermano para que puedan criarse en un ambiente lejos de la violencia Y LA PERVERSIDAD.

Vos un pobre verdulero que se convirtió en un empresario exitoso con las violaciones reiteradas de nuestros cuerpos. Con tan solo saber hoy en día cuanto sale una propiedad de las que adquiriste, me hace temblar  saber cuántas violaciones y torturas tuve que soportar para que vos te sientas tan orgulloso de ser quien decís ser, para mí sos un torturador prostituyente.

Convertiste a mis hijos en victimas indirectas y generacionales de todo lo que me hiciste a mí.

Nada de lo que nos pasó bajo el Sistema del Estado y la Justicia hubiese sucedido si vos no me hubiese convertido en  víctima, los mismos nos abandonaron, amenazaron, casi secuestran a mi hijo, fui abusada sexualmente  y más allá de que casi todo el Sistema funciono mal o esta corrompido, reitero, nada de esto hubiese sucedido si no me hubieras robado 16 años de mi vida.

Les robaste a mis hijos su niñez y adolescencia, nos quitaron la identidad que fue toda una lucha de años poder recuperar, siendo víctimas nos encarcelaron a nosotros y vos andas libre por la calle, a merced de poder en cualquier momento encontrar otras presas. Disfrutando de tus hijos, de tus nietos de tus allegados, yendo a disfrutar un día de pesca o de sol, pero por ser víctimas tuyas nosotros no pudimos abrazar nunca más a ninguno de nuestros afectos y por mucho tiempo no pudimos salir ni a comprar una golosina sin miedo, por un tiempo nos hiciste creer que nada valía la pena más que volver a tus redes.

Hoy con 40 años puedo decir que soy libre, en una jaula abierta de la que no me animo a salir. Cargando con cada secuela que quedo en mi cuerpo y en mi psiquis, y si, eso también lo hiciste vos: NEUMONIAS RECURRENTES, 8 ABORTOS, INTENTOS DE SUICIDIOS, CANCER INFILTRANTE POR HPV. MENOPAUSIA QUIRURGICA SIN LA MITAD DE MI VAGINA, OSTEOPENIA, TRASTORNO DEPRESIVO MAYOR RECIDIVANTE, TRASTORNOS DE ANGUSTIA, TRASTORNOS LIMITES DE LA PERSONALIDAD, TRASTORNO DE ESTRÉS POSTRAUMATICO, INSOMNIO, TRASTORNO ADAPTATIVO CON ALTERACION MIXTA DE LAS EMOCIONES, FIBROMIALGIA Y TABAQUISMO CON EFISEMA PULMONAR Y EPOC. Y si bien hace 7 años que salí del infierno que me sometiste, todos los días es una lucha conmigo misma para destruir esa prostituta que hiciste de mí.

Pero lo que no pudiste robarnos es la empatía, la resiliencia y el amor que existe entre nosotros; mis hijos lucharon como verdaderos guerreros, sin saber los porque eligieron acompañar  a su mama pese a cualquier situación, y tan solo Dios sabe todo lo que aguantaron con vos en mi vida y después con el Estado. Pero nada de eso los derrumbó; hoy uno está estudiando con excelentes notas y otra es cuadro de honor por sus estudios, no les robaste las fuerzas para sostener a su mama y mucho menos las ganas de progresar y salir adelante, ¡porque tienen la capacidad de transformar toda tu perversidad y maldad en futuro y lucha! Hoy termine mi secundario y con 10, una oportunidad que jamás pude tener a tu lado, saberme capaz de que todo lo que me proponga lo puedo lograr.

No te perdono, Luis Roberto Gambande, ¡pero si te suelto porque más allá de todo el infierno que viví creo en la Justicia!! Y que así sea, SE HARA JUSTICIA, POR MI Y POR TODAS. HOY TENEMOS VOZ! NINGUNA MUJER NACE PARA PUTA.

Muchas gracias