Este miércoles, Patricia Bullrich (Ministra de Seguridad) buscará estrenar su protocolo antipiquetes, cuando organizaciones sociales y de Derechos Humanos se movilicen en todo el país en conmemoración del estallido social del 2001 y en contra de las medidas impopulares que adoptó la gestión de Javier Milei en sus primeros días de gobierno.

A pesar de la advertencia de que se detendrá a quienes corten calles o instiguen a hacerlo, además de que se les quitaría los planes sociales a quienes sean identificados en la protesta y se les haría cubrir los costos de los operativos policiales, las movilizaciones fueron ratificadas a modo de desafío hacia el gobierno.

"Un gobierno que recién asume y ya tomó tantas medidas antipopulares, es evidente que preparan el terreno porque no van a hacer las cosas bien. No tienen la intención de tomar medidas para mejorar la calidad de vida de todos los argentinos. Vienen a gobernar para un sector en particular y lo han demostrado con las medidas. La devaluación no fue otra cosa que una brutal transferencia de recursos desde los sectores populares hacia lo sectores concentrados de la economía", indicó Romano en diálogo con Radio Prensa.

Por esta razón, entiende el dirigente social, "han tenido que preparar un protocolo inconstitucional y profundizar la amenaza y provocación. Tratan de criminalizar la protesta social, y ahí está la trampa de este gobierno. Es evidente que van a tomar medidas antipueblo, por eso tratan de estigmatizar al dirigente social, tildándolo de problemático, cuando los dirigentes sociales no son otra cosa que la forma de expresión de un pueblo que se defiende del avance del neoliberalismo salvaje".

Tras recordar que Bullrich organizó y participó de movilizaciones contra el gobierno de Alberto Fernández, Romano la acusó de tener doble moral. "Bullrich llamó a una desobediencia civil cuando era oposición, para protestar contra las medidas que se aplicaron en medio de una pandemia, poniendo en riesgo la vida de miles de argentinos, y cuando está en el gobierno le pinta el facho e intenta coartar libertades constitucionales. Estamos ante una dictadura encubierta", señaló.

En cuanto a las medidas adoptadas en el arranque de la gestión Milei, el titular del MUP consideró que "no hay un plan económico y por eso se toman medidas improvisadas. Provocaron que el trabajador pase a tener un salario de la mitad de lo que tenía antes de la asución de Milei, y que los sectores concentrados de la economía y los que invierten grandes capitales en el mercado financiero, pasaron a tener el doble. Gobiernan un pueblo que detestan y lo hacen para beneficiar a un solo sector, al más pudiente de Argentina".

En este sentido, concluyó que "van a producir una hiperinflación deliberada para favorecer a las empresas amigas, que son las que los acompañan y cogobiernan con ellos".