El mundo pierde a pasos agigantados la capacidad de ser empático y hasta de razonar de manera crítica. Ese mundo necesita una sacudida para despertar del transe al que lo empujaron los fracasos de los gobiernos que se autodefinían progresistas y que fue explotado al máximo por aquellos que bregan por un mundo sometido por el machismo y el dinero.
En esa coyuntura, los colectivos feministas de todas las latitudes se preparan para un nuevo 8M con movilizaciones y actividades para conmemorar la lucha por los derechos de las mujeres. Miles de mujeres y disidencias se preparan para salir a las calles para poner sobre la mesa los principales reclamos en un contexto de avance contra las principales conquistas hacia la igualdad.
Vicky Disatnick, titular de la Casa de las Mujeres Norma Nassif, dialogó con Prensa Multimedios acerca de la importancia de la movilización de este sábado: "Tenemos que seguir luchando por poner fin a la restricción para poner en práctica el protocolo de la ley IVE, que fue aprobada por la lucha de tantas mujeres jóvenes, y que nos encontramos que estamos sin remedios en los hospitales públicos. Tenemos que seguir luchando porque dejen de matarnos, por presupuesto para atender las situaciones de violencia contra la mujer, por inclusión en el ámbito laboral", señaló.
Sobre este último punto, Disatnick aseguró que "el tema principal es la precarización laboral. No hay un trabajo digno, en blanco, para la mujer. Todo es precarizado, en negro". "Este 8 de marzo es un día muy especial, tiene mucha importancia. Las flores y los bombones quedan restringidos a pequeños sectores muy conservadores, pero la enorme mayoría sabe que es un día de lucha, de reivindicación de los derechos de las mujeres", agregó.
En cuanto a lo particular de la coyuntura, a más de un año de gobierno de Javier Milei, sostuvo que "es la lucha contra un discurso misógino, como no veíamos en Argentina hace mucho tiempo. En un año y dos meses logró desbaratar proyectos y programas que habían sido reconocidos por la lucha de las mujeres en las calles. Nunca nadie nos regaló nada, todo lo que tenemos es producto de la lucha de las mujeres".
Y concluyó: "Hay miles de cuestiones que no son reconocidas y se dan por naturalizadas, como por ejemplo, que el trabajo de la mujer debe ser precarizado, que deben hacerse cargo de las tareas de cuidado sin ninguna retribución. Son cuestiones básicas, pero que todavía no hemos logrado que se reconozcan".