Jonathan Müller, más conocido como El Villano, decidió contar públicamente que fue diagnosticado con VIH. El cantante de cumbia compartió la noticia este lunes a través de un video en sus redes sociales, donde explicó en primera persona cómo vivió el momento en que recibió el resultado. “No sé quién me contagió, a quién contagié, porque hace dos años que estoy en pareja con la misma persona y gracias a Dios ella se analizó y está bien; porque siempre nos cuidamos”, relató el músico, que a sus 34 años optó por hacer público su diagnóstico con absoluta sinceridad.
El mensaje que el cantante compartió con sus seguidores no tardó en hacerse viral y generó comentarios de todo tipo en las redes sociales. Más allá de su caso particular y el masivo apoyo que recibió, la confesión pública de El Villano tuvo un efecto muy positivo: sacó el tema de debajo de la alfombra y lo puso en la agenda mediática. Rápidamente, desde varias administraciones provinciales se atajaron publicando información acerca de los programas de salud que tienen a disposición, pero aún así, no evitaron las críticas. Las organizaciones de personas y familiares de personas con VIH positivo aprovecharon la visibilidad que el cantante le dio al tema para reiterar el reclamo por mayor presupuesto para la prevención y el tratamiento, en cumplimiento estricto de la Ley 27.675 (de Respuesta Integral al VIH, Hepatitis Viral, otras Infecciones de Transmisión Sexual y Tuberculosis).
"Tenemos una gran falencia en cuanto a la comunicación y difusión de información. No tenemos ni un folleto para difundir y nos encontramos con chicos que buscan información en redes sociales, donde circula mucha desinformación. Necesitamos de los gobiernos no solo para la atención, sino también para realizar campañas de concientización e información", expresó Ruiz.
Y añadió: "Tenemos casos de chicos que adquieren el virus a través de relaciones sexuales orales, lo cual muchos desconocen. El intercambio de fluidos por esa vía también puede trasmitir el virus. Es necesaria la protección en todo momento de la relación. Si no quieren ciudarse con profilácticos, pueden acudir a un centro médico por la medicación preventiva, la cual funcionar también para casos en los que se tuvo relaciones sexuales de riesgo, si se acude dentro de las 72 horas del encuentro. Pero si no le damos a conocer esa información, nunca van a consultar ni a hacerse un diágnostico".
El titular de la ONG sostuvo que la principal preocupación ante la falta de campañas públicas es que se demora la obtención de un diagnóstico y, por lo tanto, del inicio del tratamiento. En ese sentido, muchas personas en situación de riesgo no consultan, ni acuden a realizarse los test -que son gratuitos-, hasta que ya han desarrollado la enfermedad (SIDA). Además, la desinformación conspira a favor de la falta de conciencia social y de empatía, produciendo otra consecuencia negativa, que también influye en la falta de consultas y testeos: la estigmatización y el prejuicio en contra de las personas con VIH, que en ocasiones conduce a actitudes violentas en contra de ellas.
"Obtener un diagnóstico positivo es difícil por la discriminación y el estigma. Es importante que la gente se hagan los test. La realidad muestra que a cualquier le puede tocar. Tenemos unas 140 mil personas que viven con VIH en Argentina, pero estimamos que todavía queda un 30 % de personas que no saben que conviven con el virus. Es importante que los gobiernos motiven que se realicen las test, a la par de garantizar la accesibilidad en los hospitales", subrayó Ruiz.
Para evitar el estigma, sostiene el titular de Identidad AC, es indispensable concientizar de que el VIH se trasmite, no se contagia. Y como se trasmite por relaciones sexuales sin protección, si una persona se cuida adecuadamente, no va a trasmitir el virus. "Hay que combatir el estigma, informar de que compartir con una persona no trasmite el VIH y generar conciencia de que hay que usar preservativos para tener relaciones sexuales", remarcó.
Pero además del profiláctico, existen otras formas de prevención. En este sentido, Ruiz explicó que "si uno no lo quiere usar, puede concurrir a los centros de salud y recibir una medicación preventiva". Dicho tratamiento reduce significativamente el riesgo de transmisión, disminuyendo considerablemente la carga del virus y haciéndolo indetectable. Llegado a ese punto, el virus no se transmite. La ciencia médica evolucionó tanto en ese camino, que incluso las madres con VIH pueden evitar la transmisión a sus hijos. Además, a partir del inicio del tratamiento, se refuerza el sistema inmunológico y se garantiza mejor calidad de vida.
"El 55 % de los casos en Tucumán llegan en etapa tardía, lo que significa que ya están en etapa de SIDA. Por eso es importante el diagnóstico rápido, para iniciar el tratamiento cuanto antes, para levantar las defensas y reducir la carga del virus. Pero si una persona llega de manera tardía, el tratamiento demora mucho más en lograr los resultados. Muchos llegan cuando tienen algún problema de salud, con malestares o padeciendo de alguna otra enfermedad. Es importante que en casos de riesgo, se acuda rápidamente a realizarse el testeo", remarcó.
Identidad Asociación Civil funciona en San Lorenzo 434, en el gremio de ATEP. Sus vías de contacto son a través del número 381-6048077, o a través de sus redes sociales, en donde se los encuentra como ONG Identidad AC. "Los vamos a orientar y asistirlos para obtener turnos. Los vamos a acompañar en todo momento", sentenció Ruiz.