La situación se desató cuando los egresados llegaron al salón Rancho Bulacio para llevar adelante la cena de fin de curso y se encontraron con el lugar cerrado y sin ningún servicio contratado. Ante la falta de respuestas por parte del responsable del evento, quien quedó inubicable, los damnificados realizaron la denuncia correspondiente en la Comisaría de Concepción.
Frente al impacto social del hecho, el ministro del Interior Darío Monteros intervino de manera directa y confirmó que la cena fue reprogramada. El festejo se realizará el próximo 26 de diciembre a las 22 horas en el Salón Esmeralda, ubicado en calle Catamarca al 300 de la ciudad de Concepción.
Desde el Gobierno provincial indicaron que el objetivo de esta medida es reparar el daño emocional causado y garantizar que los egresados puedan vivir una noche que marca el cierre de una etapa importante de sus vidas.
En paralelo, la causa judicial continúa su curso y las familias mantienen firme el reclamo para que se investigue lo sucedido y se determinen responsabilidades. Además, se anunció una marcha para este lunes a las 8 de la mañana en pedido de justicia.
