La zona de El Naranjo, y el Timbó Nuevo- en el departamento Burruyacú- a unos 20 kilómetros de la capital tucumana se convirtió de blanco por la caída de granizo. Solo fueron varios minutos para que el paisaje se transformara.
La gente que circulaba por la zona registró varios momentos del fenómeno que se vivía en la tarde de tormenta.