En Concepción algunos que peinan canas recuerdan, como una leyenda, al primer grupo guerrillero insurgente del país, los uturuncos (en quichua : hombre-puma), que surgió en 1959 y se sostuvo hasta 1962, oculto en la selva tucumana.

El único sobreviviente, que hoy tiene 81 años, proporcionó los datos para que los excursionistas encontraran la cueva.

De acuerdo a crónicas policiales de la época, todo se desata con el asesinato de un obrero azucarero en Tucumán. Enrique Manuel Mena, líder peronista de izquierda que tomó el alias de "Comandante Uturunco", exhortó a otros 20 obreros a escalar el cerro de Cochuna, a 35 kilómetros al oeste de “La Perla del Sur”, y combatir a "los socios del Imperio". Desde allí iniciaron sus acciones sin objetivos claros, con ataques a comisarías, cuarteles de bomberos y comercios.

Su acción más notoria fue la de la Nochebuena de 1959, cuando ya sumaban unos 50 hombres, en un operativo espectacular para aquel momento, tomaron la comisaría de Frías, en Santiago del Estero. Pero el grupo, mal entrenado y carente de apoyo entre la población, quedó desbaratado en poco tiempo por las fuerzas de seguridad del Plan Conintes (Conmoción Interna del Estado) del presidente Arturo Frondizi. El comandante Uturunco fue arrestado en 1960.

En la actualidad poco se conoce del sitio especifico donde el grupo insurgente se refugiaba y si dejaron elementos, como armas, utensilios, mercadería que los pudieran vincular con su accionar hace más de 50 años. Sin embargo Oscar Sprenger, quien es organizador de eventos, junto a su familia, desarrollaron un emprendimiento turístico en un maravilloso paraje, a 35 Km. al oeste de Concepción, llamado “Refugio Cochuna”, donde además de hacer actividades al aire libre, cabalgatas, trekking, campamentismo, entre otras cosas, buscaron, también, la veta histórica porque allí inscribe su nombre en la historia política reciente, el surgimiento del primer grupo guerrillero rural de la Argentina.

“Desde hace algunos años queremos desarrollar un polo turístico en esta zona de la provincia, que no esta muy explotada. Al que le gusta el ecoturismo, este lugar es propicio. Todo está cerca, por ejemplo: la “Laguna del Tesoro”, “La Banderita”; hay ríos, como el Cochuna, donde se puede realizar diferentes deportes, pero también estos montes guardan historias únicas. Hace un tiempo tuvimos la posibilidad de conocer al señor, Julio Robles (81 años) quien desde 1961 hasta el 62 participó, con el alias de Capitán Mickey, del grupo Uturunco, que se refugiaron durante esos años en una cueva, que se encuentra dentro de nuestra estancia. Ese hallazgo motivó, no sólo a nosotros cuando nos enteramos sino a muchas personas de aquí y de otras provincias, a visitar el lugar”, contó a 200, Sprenger.

Si bien, durante este año, se han podido concretar 3 caminatas hacia la Cueva, la idea de los organizadores es cumplir, el próximo mes, el sueño del Capitán Mickey, de volver, después de 50 años, a ese “escondite” que marcó su vida.

La caminata hacia la Cueva dura cerca de dos horas. Es un hermoso recorrido, rodeado de árboles enormes y exuberantes que se enredan en su base con arbustos y hojas caídas. El suelo no se ve. Todo es verde.

Se parte por la mañana temprano, el trayecto es matizado por el canto de las aves posadas en las ramas de algún roble o nogal. Y, si se mira con mucho cuidado, pueden distinguirse un tucán o un picaflor y hasta el vuelo de un águila o una pava de monte corriendo entre los troncos. Mientras, a lo lejos, aparecen o se esconden corzuelas, venados, gatos onzas, pecaríes y —con mucha suerte— algún puma que rehúye al contacto con los lugares poblados. En el camino que transcurre por un paraje llamado el “Bosque de la Fantasía” entre valles, picadas y arroyos finalmente se accede, casi oculta, a dos piedras de unas impresionantes dimensiones. Debajo de estas rocas se encuentra la Cueva de 14 metros ancho, 12 metros de profundidad y 4 de alto, que fue utilizada por los guerrilleros para descansar, resguardarse de las inclemencias del tiempo o compartir una comida.

Sprenger dio detalles de cómo y cuándo tienen previsto realizar esta caminata que tiene como objetivo dar cumplimiento al deseo del octogenario revolucionario, quien actuó junto a otras 18 personas, guiados por su pensamiento ideológico, hace más 50 años.

¿Desde cuándo funciona el “Refugio Cochuna” y cómo se accde?

Oscar Sprenger: “Es un proyecto de ecoturismo que presentamos hace 6 años ante las autoridades del Ente Tucumán Turismo, para que pueda ser tomado dentro del circuito turístico de nuestra provincia, a pesar que aun no pudimos lograr ese apoyo, nosotros arrancamos con actividades durante todo el año como trekking, cabalgatas, campamento, caminatas nocturnas que no son muy comunes por esta parte de país, fogones entre otras cosas. Esto surgió para que la gente tenga una opción distinta y pueda realizar tareas al aire libre sin que signifique ningún riesgo.

Acceder a nuestro predio es fácil: si vienen desde San Miguel de Tucumán, deben hacerlo por la ruta nacional 38 hasta la cuidad de Concepción, y luego tomar hacia el oeste la ruta nacional 65, transitar hasta el kilómetro 35 donde se encuentra la entrada a nuestro campo que está muy bien señalizado”.

¿Cómo lograron encontrar la mítica Cueva de los Uturuncos?

Oscar Sprenger: “Hace dos años un señor llamado Julio Robles, se presentó en mi casa y me dijo que él era el último “Uturunco” con vida del grupo guerrillero que actuó entre 1961 hasta 1962. Este señor es oriundo de Buenos Aires pero actualmente vive en Córdoba. Me dijo además que su sueño era volver a la cueva, así que nos dio algunas coordenadas por donde podíamos acceder a este lugar y al cabo de unos días nos pusimos a recorrer el sitio a la altura del río El Calao, por ruta nacional 65, y luego de un par de horas de caminata, monte adentro, dimos con estas rocas que estaban muy bien ocultas y en un sector, te diría casi virgen. Sentimos una alegría enorme haber encontrado el sitio ya que se encuentra dentro de nuestra propiedad”.

¿Cómo es el recorrido para llegar a la Cueva?

Oscar Sprenger: “El recorrido es maravilloso, vas entrando al monte, por un sendero que sin darte cuenta comienzas a subir por un filo, todo rodeado de árboles y plantas, es intenso el canto de los pájaros, todos los sentidos se estimulan. La maleza te obliga en ciertos lugares a utilizar un machete para abrirte camino, cruzas en varias oportunidades arroyos con agua fría y cristalina, luego de unos 60 minutos de caminata intensa, de pronto te encuentras con estas dos enormes rocas que están ubicadas estratégicamente. Allí esta la Cueva.

¿Qué características tiene?

Oscar Sprenger: “La cueva tiene, aproximadamente, 14 metros ancho, 12 metros de profundidad y 4 de alto, y fue utilizada por los guerrilleros para descansar por la noche y resguardarse de las inclemencias del tiempo o compartir una comida. Sólo se puede acceder a una parte de la cavidad ya que tratamos de preservarla intacta, y también por razones de seguridad porque sabemos que el lugar es usado por algunos animales. Sin embargo dentro de la misma hay agua de una vertiente interna, y el suelo en algunos sectores es muy arenoso. También pudimos observar algunas pisadas de caballos, de vacas y de algún gato del monte que quedaron fijadas en la tierra. A medida que vas ingresando la cueva se va achicando”.

¿Pudieron encontrar algunos elementos que utilizaron los “Uturuncos”?

Oscar Sprenger:”Si, como te dije ellos allí dormían solamente por la noche, durante el día estaban escondidos en otros lugares o salían a cazar para poder alimentarse. Pero pudimos encontrar unos mecheros y unas latas que usaban para cocinar, un calentador herrumbrado y una caja de metal que estaba oculta en un sitio que Robles, nos indicó y que pudimos encontrar. Allí había saquitos de té, algo de yerba mate, utensilios entre otras cosas”.

De acuerdo con lo que pudiste conversar con el Capitán Mickey ¿hubo algún enfrentamiento, en éste lugar, con las fuerzas militares?

OS: “Ellos mantuvieron un sólo enfrentamiento en una zona cercana a la cueva que se llama “Los Chorizos”. En ese combate hubo bajas de los dos bandos. Luego los guerrilleros se escaparon por el filo de un cerro y en el trayecto se encontraron con un señor de apellido Suárez, que trabajaba en un puesto en la zona de Cochuna cuidando animales. Este hombre es clave, porque es la persona que le da la información a los “Uturuncos” para que se escondan en la Cueva. Y fue tan importante en la vida de los guerrilleros que allí hicieron una especie de bunker, desde donde realizaban algunas operaciones y que mucha gente de Concepción recuerda porque solían asaltar a las personas que pasaban con sus vehículos por ruta 65 y les despojaban de sus pertenencias y de mercaderías”.

¿Cuándo tienen programada la fecha de la caminata, para cumplirle el sueño a Julio Robles?

OS: “Estamos trabajando para concretarla a fines de octubre o principio de noviembre, no extenderla más allá porque comienza la época de lluvia y es difícil el acceso. También estamos buscando la forma más adecuada para que don Robles pueda acceder sin problemas, no nos olvidemos que él tiene hoy 81 años y el recorrido será a caballo. Quiero contarles algo más, es probable que se sume a este evento el periodista de Radio 10 (Buenos Aires) Rolando Hanglin, quien me hizo una nota hace un mes, vía telefónica, en su programa y quedó entusiasmado con la historia y por supuesto con el lugar, así que esperemos que podamos concretar, el sueño de Robles de volver después de 50 años a un lugar que marcó profundamente su vida, a tal punto que tiene grabado en su memoria detalles del lugar que yo mismo pude constatar y que me reservo por razones privadas”.

Por último. ¿Tienen prevista alguna actividad durante este mes en el “Refugio Cochuna”?

OS: “Así es y los invitamos a todos ustedes también, al primer “Trekking Nocturno” en el sur de la provincia que se realizará este fin de semana (sábado y domingo), dentro de nuestro predio que será un experiencia increíble, ya que de noche el monte cambia totalmente. Vamos con un equipo de personas que estarán a disposición de los participantes, entre ellos médicos y dos bomberos voluntarios de Concepción que se especializan en rescates. Haremos un recorrido de unas dos horas, llegaremos hasta un lugar desde donde se puede observar a las luces de Concepción y de las otras ciudades del interior que son realmente una vista espectacular. También comeremos un rico asado, habrá un fogón y claro la infaltable guitarreada. Para poder inscribirse pueden llamar al celular (0381) 156-817956 o bien nos pueden buscar en el nuestro facebook “Refugio Cochuna”. Por Rafael Medina