El ingeniero naval Jorge Bojanic reveló la historia detrás del proyecto Papel de Tucumán, una planta ideada durante la última dictadura militar para apuntalar el gobierno de Antonio Bussi en la provincia, que se convertiría en competidora de Papel Prensa, pero que nunca pudo concretarse por la imposibilidad de fabricar papel en la zona y la misteriosa muerte del impulsor del proyecto.
En 1977 Bojanic era Gerente de Planeamiento del
proyecto Papel Tucumán y estaba a cargo de elaborar un informe para determinar
si era posible fabricar papel para diarios a partir del bagazo del azúcar. Su
jefe era el doctor Carlos Cañete.
De acuerdo a la revelación del ingeniero
realizada en el programa Minuto 1 de C5N, los
directivos de Papel Prensa "temían de Papel de Tucumán porque serían
competidores".
El estudio que estaba a su cargo determinó que
era imposible extraer materia prima de la caña de azúcar. De acuerdo al relato
del hombre, Cañete reaccionó violentamente y le sugirió que se fuera del país
"porque era hombre muerto".
"(Cañete) Me pide una serie de alternativas
para instalar en Tucumán, pero con otra materia prima. Quedamos en encontrarnos
el 7 de mayo de 1981 en Aeroparque", narró. Su jefe viajaría a Buenos
Aires, contradiciendo las órdenes de la Junta Militar, para plantear al
Gobierno la necesidad de relocalizar Papel de Tucumán, pero nunca llegaría a
destino.
De acuerdo al relato de Bojanic, mientras lo
aguardaba en el aeropuerto, vio ingresar a Jorge Baeza, funcionario de la
dictadura militar, dar órdenes para que cruzasen un camión en la pista de
aterrizaje. Según su relato, en
el avión procedente de Tucumán se había colocado una bomba que estallaría
cuando despegase o aterrizase y luego se culparía a Montoneros.
El vuelo de Austral con destino Buenos Aires que
traía a Cañete explotó frente a las costas de Quilmes, a donde había sido
desviado por la presencia del camión en pista. Los indicios indican que no se
trató de un accidente si no de una implosión. Oficialmente, se informó que las
cajas negras nunca aparecieron, pero Bojanic sostiene que sí se hallaron.
"Si Cañete desaparecía, el proyecto de papel de Tucumán desaparecía y
Papel Prensa dejaba de tener competencia", concluyó.