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Inauguraron el nuevo centro de día del Cottolengo Don Orione

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El Cottolengo Don Orione inauguró el Centro de Día Papa Francisco para la rehabilitación de personas con discapacidad que no viven en la institución.

“Estamos alegres porque esta obra beneficia a mucha gente. Hoy venimos a comprometernos a seguir ayudando”, celebró Regino Amado, ministro de Gobierno y Justicia, que estuvo acompañado por la secretaria de Gobierno, Carolina Vargas Aignasse, y el secretario de Relaciones Institucionales de Tucumán, Bernardo García Hamilton.

La institución viene trabajando para la comunidad hace más de 70 años. “Esta obra tiene el aporte de todos. Nuestro granito de arena de hoy beneficiará a mucha gente” dijo Amado y destacó el trabajo de los voluntarios en el Cottolengo: “Invitamos a los tucumanos acompañar a todas estas personas que están solas y necesitan de nosotros”.

El arzobispo de la provincia, Carlos Sánchez, agradeció la colaboración de los tucumanos para culminar esta obra. “El corazón de Don Orione está en la Argentina. Hoy entre nosotros se respira caridad porque los residentes de este lugar son nuestros hermanos”, remarcó y llamó a la sociedad a acercarse, “más allá de la atención técnica, ellos necesitan de nuestro cariño que los sana”.

“Esta obra es el resultado de la unidad de muchas personas que creen en la obra de Don Orione”, dijo el padre, Aníbal Quevedo, director de la institución. La obra que tardó dos años para ejecutarse contó con el aporte: del Gobierno provincial, intendencia capitalina, instituciones privadas, particulares y recursos propios.

Quevedo sostuvo que la comunidad orionita sigue el modelo de la Organización Mundial de la Salud (OMS)  orientado a que los residentes  del centro reciban atención de manera ambulatoria, “con esta obra apuntamos a eso”, remarcó.

Atención

El nuevo centro atenderá a 80 personas –se estima que en dos turnos por día-, contará con un equipo interdisciplinario de profesionales (neurólogo, psicólogo, kinesiólogo, fonoaudiólogo, terapista ocupacional)  para atender a las personas  que “tengan obstáculos o no puedan valerse por sí mismos”.

Además habrá una sala multisensorial preparada para estimular y mejorar a pacientes diagnosticados con Trastorno Generalizado del Desarrollo (TGD), Síndrome de Asperger, Mal de Alzheimer y otras patologías.