Tras la clausura de la Iglesia San Francisco por parte de la municipalidad capitalina por un posible derrumbe, desde el Ente Cultural Tucumán se envió un mensaje de tranquilidad a la población y se descartó, en base al diagnóstico de especialistas, que  la estructura del edificio esté en peligro de colapsar. 

 “Con ingenieros y arquitectos del municipio capitalino evaluamos la situación del edificio y  se constató que se ha desprendido el revoque en dos lugares: en el hall de acceso y cerca del altar. Los ingenieros dicen que no hay ninguna dificultad estructural para asustarse”, aseguró Mercedes Aguirre, directora de Patrimonio Cultural del Ente Cultural Tucumán, en declaraciones al programa Primerafuente Radio que se emite todas las mañanas por Radio Prensa.

“La Iglesia no tiene ningún riesgo, salvo el desprendimiento de todo lo que es revestimiento. Quizás clausurar es una exageración, pero no está mal que se tomen este tipo de medidas ante cualquier anuncio que da el edificio. Es muy razonable que se encienda el alarma después de la tragedia del ex Parravicini, que dejó lamentablemente tres muertes. Ese derrumbe  nos dejó marcados con un alerta tremenda ante cualquier situación. Pero quiero dejarles tranquilidad, porque la estructura de la Iglesia está en condiciones, o por lo menos es lo que opinan los ingenieros”, señaló la funcionaria.

Asimismo, recordó que hace cuatro años que se hizo todo el trabajo de la nave central, techo y desagüe fluvial, y se reforzó el cimiento en el área de la sacristía. “Con los años que tiene este edificio, los cimientos ya no existen, entonces hay que reforzarlos de otra manera.  Lo que está pendiente es la recuperación de los murales, las pinturas, y en algunos sectores, con el tema de la humedad, revoques”.

La arquitecta Aguirre también aclaró que: “la Iglesia no es una propiedad del Estado, entonces los que habitan el lugar son los que tienen que preservar. En este caso, la Iglesia San Francisco es un monumento nacional, entonces puede intervenir el Estado para ayudar a su preservación”.

La iglesia San Francisco, ubicada en la esquina de calles San Martín y 25 de Mayo del microcentro tucumano, fue construida en el año 1767.  En su interior se guardan objetos históricos como por ejemplo: la mesa donde se firmó el acta de la Independencia de Argentina, la primera bandera nacional argentina enarbolada en Tucumán, el 8 de octubre de 1812, el altar mayor que fue realizado por indígenas de Misiones.

Frente al altar se encuentra enterrado Monseñor José Agustín Molina, que fue prosecretario del Congreso de Tucumán en 1816. En unas de las alas del convento tuvieron su alojamiento y enfermería las tropas de Manuel Belgrano luego de la Batalla de Tucumán.