Los gobernadores de Buenos Aires, Axel Kicillof, y de Entre Ríos, Rogelio Frigerio, compartieron un evento en Paraná organizado por el Consejo Federal de Inversiones (CFI) y por la administración local y dieron a conocer sus perspectivas sobre diferentes ítems, como la coyuntura, el federalismo y los impuestos, entre otros.
Si bien se trató de una cumbre con mandatarios de diversos espacios políticos que coincidieron en remarcar la necesidad de una reforma impositiva y de más inversión del Estado nacional para apuntalar la producción, hubo un cruce de opiniones entre el bonaerense y el entrerriano sobre el proteccionismo y la apertura de la economía.
Kicillof aseguró que trabajará para ser un "escudo contra el programa económico" de Milei Una diferencia de miradas que, pese al mate que ambos compartieron a la vista de todos, se rumoreaba en los pasillos del Centro Provincial de Convenciones en Paraná, y que se hizo explícita en parte de los discursos durante la jornada titulada "Una hoja de ruta hacia un futuro federal", que se desarrolló desde las 8:30.
Entre los anfitriones del encuentro: el titular del CFI, Ignacio Lamothe, y el mandatario local Frigerio. Además de Kicillof, también llegaron a la capital provincial Ignacio Torres (Chubut), Sergio Ziliotto (La Pampa), Maximiliano Pullaro (Santa Fe) y Raúl Jalil (Catamarca).
Kicillof, que fue el último en sumarse y el primer gobernador en hablar, marcó un recorrido histórico y un panorama de situación a partir de los aranceles aplicados por el presidente de EEUU, Donald Trump, a quien acusó de abrir la caja de Pandora.
En ese marco, el bonaerense apuntó sus cañones contra el Gobierno nacional: "No hay líder mundial, presidente o bloque de países que no tenga como objetivo defender la industria y el trabajo nacional".
"Hoy se respira un clima de defender lo nuestro. En todo el mundo menos en un país: Argentina", dijo sobre la administración de Javier Milei, a quien acusó de no tener "en su agenda ni las palabras producción y trabajo", lanzó el mandatario.
Al inicio de su discurso, el exministro de Economía aseguró que se prometió "no ser polémico" y explicó que "Argentina tiene que ser un país primario e industrial, y también minero y petrolero".
"Tiene que ser todo. Tenemos que poder agregar valor", mencionó. Posteriormente, Rogelio Frigerio, a cargo del discurso final de la apertura, le respondió a Kicillof: "Hoy el mundo se está cerrando, pero a pesar del discurso, Argentina es uno de los países más cerrados del mundo".
"¿Y como no serlo, si somos un país que grava sus exportaciones?", completó el exministro del Interior de Mauricio Macri.
Acto seguido, se hizo eco de las palabras del chubutense Ignacio Torres, también del PRO, quien había reclamado discutir una reforma fiscal. "Recogemos el guante para trabajar en una reforma fiscal menos regresiva, para mejorar nuestra competitividad", mencionó.
En esa línea, el entrerriano pidió "tener una política tributaria que fomente la generación de empleo de calidad en la Argentina".
"Si es eliminando IIBB, trabajando en una modificación al IVA, aceptar el convite y discutir", planteó.
No obstante, reclamó que el Gobierno nacional haga lo propio con las retenciones y el impuesto al cheque. Aunque el evento se desarrolló en un clima de cordialidad y los mandatarios coincidieron en las principales aristas, algunos funcionarios de la administración entrerriana mencionaron a voces sus diferencias con el bonaerense.
"Tenemos modelos y miradas distintas", llegaron a mencionar entre los presentes en el Centro Provincial de Convenciones. Esas diferencias se hicieron explícitas, al menos por un instante, en el escenario./ambito.com