A 10 años de la primera marcha Ni Una Menos, El Observatorio "Mujeres, Disidencias y Derechos" de la organización MuMaLá (Mujeres de la Matria Latinoamericana) informó que en la última década se cometieron 2.590 femicidios, femicidios vinculados y trans/travesticidios en Argentina, es decir uno cada 33 horas.
La primera movilización se realizó el 3 de junio de 2015. Desde ese momento, el promedio anual se ubicó entre 250 y 270 femicidios: el peor año fue 2017, cuando se registraron 304 casos. Además, en los últimos cinco años se contabilizaron 2.647 tentativas.
"Hoy por hoy estamos hablando de un femicidio cada 33 horas y lo que realmente nos preocupa es que, por cada femicidio, hay dos intentos. Esa es la violencia que se expresa cotidianamente y de la peor de las formas", aseguró la presidenta de MuMaLá, Victoria Aguirre, a la agencia Noticias Argentinas.
Según el monitoreo de medios, portales judiciales y colaboraciones territoriales que realiza la organización, en lo que va de 2025 ya se contabilizaron 95 femicidios. La provincia con más casos registrados es Buenos Aires, con 44, pero advierten que la situación es más preocupante en los territorios con baja densidad poblacional: Mendoza y Córdoba registran 6, seguidas por Chaco con 5 y Santa Fe con 8.Instagram @mumalanacionalEste año, como cada 3 de junio, se realizarán movilizaciones en todo el país.
La particularidad es que en Ciudad de Buenos Aires será un día después, el miércoles 4, desde las 16 en el Congreso. El objetivo es "unir las luchas" y coincidir con la marcha de jubilados, trabajadores del Hospital Garrahan y otros reclamos.Uno de los principales ejes de la movilización será el rechazo al "ajuste y la crueldad" del gobierno de Javier Milei, que desmanteló y desfinanció programas y políticas públicas clave en materia de género y protección de los derechos de las mujeres y personas LGBTI+.
"Es la primera vez en casi 40 años que la Argentina carece de un organismo con competencias específicas para la atención y prevención de la violencia de género. A ello se suman las reducciones presupuestarias del programa Acompañar y la transformación de la Línea 144 en un servicio genérico para atender a cualquier persona en situación de violencia", denunció Amnistía Internacional Argentina.
"Se han logrado avances históricos, pero también enfrentamos retrocesos alarmantes. En un contexto de discursos negacionistas y desmantelamiento de políticas públicas, es esa misma fuerza la que necesitamos para defender lo logrado y exigir al Estado que cumpla con sus obligaciones y garantice a mujeres y niñas una vida libre de violencia", aseguró la directora ejecutiva de Amnistía, Mariela Belski.