Luego de las duras críticas por parte de AETAT, los empresarios del transporte público fueron recibidos por funcionarios de la Municipalidad capitalina. Al término de la reunión, el vicepresidente de la cámara empresarial reiteró sus cuestionamientos a la Intendencia y ratificó el planteo de un cambio "urgente" del modelo de trasnporte. "Creemos que es la solución el sistema que adoptó Córdoba. Hoy en día con la tecnología que hay, ellos pueden disponer qué frecuencia, qué ramal, qué línea, cuántos kilómetros, a cuántos minutos cada coche o cada unidad, como queramos llamarlo, y que nos paguen por kilómetro realizado. Por supuesto que tenemos que andar a la frecuencia y hacer la cantidad de kilómetros que disponga el municipio, en este caso poder concedente", explicó.
“La responsabilidad es del poder concedente. La ordenanza 400/79 establece que debe garantizarse la ecuación económica para poder prestar el servicio, y eso no sucede desde hace mucho tiempo”, expresó.
Al ser consultado si el sector había solicitado $2.000 millones de compensación para esto, el representante de AETAT lo confirmó: "Es correcto. Nosotros propusimos que el municipio y el Consejo Deliberante vía, por ejemplo, la cátedra de costo de la UNT, elaboren un estudio técnico de costo".
Además, el empresario defendió la gestión de las líneas urbanas y negó que haya demoras prolongadas. “No hay esperas de media hora. Puede haber algún incidente o un coche roto, pero no es la regla”, afirmó, y aseguró que el transporte tucumano es “excelente en relación con la retribución que recibe”.
Sobre las obras que realiza la Municipalidad para mejorar las calles, sostuvo que "el aporte lo hace la sociedad. Lo he valorado en su momento, como también he valorado que deben ser arterias exclusivas y no carriles exclusivos", señaló en alusión al Plan de Movilidad Urbana.
Por último, y si bien reconoció que "el Municipio abona el 55 % de los boletos estudiantiles", subrayó que "las empresas absorbemos el resto". "Osea que no hay ningún aporte real del Municipio". "Si utilizamos el viejo metódo de estudios de costos, el boleto se hace impagable para el usuario. Los costos aumentaron y bajaron los ingresos por corte de boleto en un 30 %. Por lo tanto, el estudio nos da un boleto de $4.000", sentenció.