El pedido surge a un mes de la declaración de la OMS que señala que el glifosato, el herbicida más usado en el mundo, podría generar cáncer. Franco Segesso, coordinador de la campaña de Agroecología de Greenpeace Andino dijo que "el agricultor que depende de los pesticidas está atrapado en un círculo vicioso, siempre necesita más pesticidas".
En 2014, el glifosato afectó a unos 90 millones de hectáreas y miles de pueblos latinoamericanos. En la Argentina se usan más de 200 millones de litros al año. Hoy los cultivos transgénicos ocupan el 72 por ciento del tierras cultivable del país. Las ventas de Monsanto en 2014 equivalen al 71 por ciento del PBI más fuerte de la región, el de Brasil.