Las entradas fueron detectadas en distintas plataformas, por lo que la Justicia abrió una investigación para descubrir si se trata de una estafa o si son originales, lo que significaría la existencia de lazos con la venta oficial.
Aunque el estadio de River tiene una capacidad superior a los 83 mil espectadores, la entidad madre decidió poner a disposición tan solo 63.361. El resto fueron destinados a familiares y allegados de los jugadores; a personajes de la farándula; dirigentes políticos y empresas relacionadas a la organización del evento o patrocinadoras.
Apenas se dio comienzo a la venta, a las 14, los usuarios en fila superaron el millón y medio, pero no tardaron en explotar de bronca, contemplando que la lentitud del proceso o las fallas en el sistema (retrocedía la ubicación designada de manera aleatoria) fueron permanentes. Cada internauta tuvo la posibilidad de comprar hasta seis tickets, que posteriormente deberá retirar con el comprobante de compra emitido por el sistema.
Después de que cerró la venta oficial, las entradas fueron detectadas en distintas plataformas, por lo que la Justicia abrió una investigación para descubrir si se trata de una estafa o si son originales, lo que significaría la existencia de lazos con la venta oficial.