El acercamiento responde a una necesidad urgente de ampliar la base política. El propio ministro de Economía, Luis Caputo, reveló que la administración de Donald Trump, tras el reciente viaje de Milei a EE. UU., exigió explícitamente "Trabajen en la gobernabilidad" como condición para avanzar con la asistencia financiera y destrabar las reformas económicas.
La relación entre ambos se había enfriado drásticamente tras un vínculo inicial fluido. Hace días, Macri reconoció que no hablaba ni veía al presidente desde hacía "más de un año", aunque siempre se mostró "a disposición" para ayudar.
Ahora, con la elección a la vuelta de la esquina, el PRO se presenta como el socio clave para impulsar la agenda de reformas en el Congreso. Señales como la foto reciente del jefe de Gabinete, Guillermo Francos, con Macri, compartida por el propio Milei en redes, confirman el aval presidencial a este deshielo, buscando enviar una señal de fortaleza institucional al mercado y al electorado.