La vivienda era habitada por la familia compuesta por Sabrina Garzón, Ricardo Dávila y sus tres hijos. Al momento del siniestro, dos de los menores se encontraban dentro de la casa, pero afortunadamente resultaron ilesos.
Sin embargo, los padres sufrieron heridas y debieron ser asistidos. Ambos fueron trasladados de urgencia al Hospital Regional de Concepción. Posteriormente, debido a la gravedad de las quemaduras en su rostro, Ricardo Dávila fue derivado al Hospital Centro de Salud en San Miguel de Tucumán para recibir atención médica especializada.
Personal de Bomberos Voluntarios de Concepción trabajó arduamente en el lugar para sofocar el fuego y, gracias a su intervención, se logró evitar que las llamas se propagaran a las viviendas contiguas.