"Denominase "Hospital Centro de Salud Dr. Jesús María Amenábar" al actual Hospital Centro de Salud Zenón J. Santillán a partir de la entrada en vigencia de la presente ley", reza el artículo 1° del Proyecto de Ley que presentó el legislador Javier Morof.

Con el acompañamiento de otros integrantes del bloque oficialista Justicialista de Todos, como Daniel Deiana, Raúl Ferrazano, Eduardo Cobos, Manuel Yapura Astorga y Dante Loza, Morof pretende lograr la sanción de la norma para rendir de ese modo un homenaje al recientemente fallecido profesional de la salud, Jesús María Amenábar, afectado por Covid-19.

En los considerandos de la iniciativa, el legislador Morof detalló las cualidades que lo hacen merecedor de este reconocimiento por parte de la Legislatura, en representación de todos los tucumanos:

El Dr. Jesús María Amenábar nació en San Miguel de Tucumán el 22 de agosto de 1956. Fue médico, especialista en cirugía general por la Asociación Argentina de Cirugía, por la Academia Nacional de Medicina y por el Ministerio de Salud Pública de la Nación, y certificado en las especialidades Cirugía General, Cirugía Torácica y Coloproctología. También fue diplomado en Educación Médica.

En su juventud, fue campeón tucumano de natación y finalista del Campeonato Argentino de Natación, actividad deportiva a la que se dedicó hasta los primeros años de sus estudios universitarios. La pileta climatizada del Club Central Córdoba lleva su nombre en honor a su destacada actuación como nadador federado.

Desde temprana edad estudió piano en la Escuela Universitaria de Música, en la que permaneció más de una década.

Fue discípulo de los maestros Nilda Deniflé y Mario Magliani. También integró el Coro Universitario de Tucumán y el Conjunto Musical los Huayna Sumaj bajo la dirección del maestro Luis "Pato" Gentilini.

Fue un apasionado de la música clásica y folklórica toda su vida.

Estudió medicina en la Universidad Nacional de Tucumán, de la que egresaría el 27 de febrero de 1981 con diploma de honor como tercer promedio de la carrera a sus 24 años.

Luego realizaría toda la carrera docente en esta Casa de Estudios. Fue sucesivamente Jefe de Trabajos Prácticos, Profesor Adjunto, Profesor Asociado y Profesor Titular de la II Cátedra de Patología y Clínica Quirúrgicas de la Facultad de Medicina, rol que aún desempeñaba al momento de su muerte. Accedió a todos estos cargos por concurso de antecedentes y oposición.

Una vez egresado como médico, obtuvo diversas residencias por concurso en la Ciudad de Buenos Aires. Fue residente y jefe de residentes de Cirugía General en el Hospital Ramos Mejías (1982-1986) y residente de Cirugía Oncológica en el Instituto Ángel H. Roffo de la UBA (1986-1988).

En el año 1988, ganó la beca del Colegio de Medicina de los Hospitales de París y se trasladó a Francia. Se desempeñó en el Servicio de Cirugía General del Hospital Universitario Tenon de París (1988-1989), siendo elegido luego Jefe de Clínica de Cirugía de ese mismo servicio.

Desde 1990 a 1994 fue interno de los servicios de cirugía del Centro Médico de la Porte de Choisy y del Servicio de Cirugía Oncológica del Instituto Gustave-Roussy - Francia.

Realizó más de cien publicaciones y trabajos de investigación en distintas revistas especializadas nacionales y extranjeras.

Tuvo una activa participación en reuniones científicas como disertante y como conferencista, y fue relator oficial en encuentros de su especialidad. Participó en proyectos de investigación del Grupo Multidisciplinario de Hidatidosis Tucumán y fue integrante de proyectos del CIUNT.

Es coautor de diversos libros. Obtuvo sucesivos premios del certamen internacional Video-Med en los años 1996, 1998, 2000 y 2004; el premio "Roberto Perdomo" de la Asociación Internacional de Hidatidología (2009); el Primer Premio Poster "Hidatidosis: Abordaje Multidisciplinario e Interinstitucional" (2010); y el reconocimiento del Área Operativa Alta Montaña por el operativo sanitario en la localidad de Anfama (2011); entre otras distinciones.

A pesar de su exitoso desempeño en el exterior, decidió volver a Tucumán y prestar servicio en el sistema público de salud de nuestra provincia.

Esta elección pone de resalto el compromiso del Dr. Amenábar con su país. Fue un apasionado del hospital público, y por ello trabajó en el Centro de Salud ad honorem durante ocho años.

Recién en el año 2001 fue nombrado médico de planta. Hasta ese momento se dedicó a la prestación de sus servicios y a la formación de recursos humanos sin recibir remuneración alguna.

Luego continuaría trabajando en esta institución pública, donde se transformó en un verdadero referente.

Falleció víctima de COVID-19 en el mismo hospital público en el que se desempeñó durante tantos años. Su muerte se produjo el mismo día en el que se cumplían 34 años del fallecimiento de su padre, el Dr. Alfredo Amenábar, un destacado cirujano que también fue un indiscutido referente del Centro de Salud, cuyo anfiteatro lleva su nombre.

Jesús Amenábar dedicó toda su vida a la salud de sus pacientes, y por ello fue reconocido por sus colegas y sus alumnos. Innumerables testimonios dan cuenta de su solvencia profesional, su vocación de servicio, su calidad Solicito a mis pares que acompañen, con su voto afirmativo, el presente proyecto de ley.