Este martes se detectaron cinco nuevos casos de falsas amenazas de bomba en los Institutos John Kennedy y Carlos Pellegrini, y los Colegios Nuestra Señora del Huerto, Belgrano y San Francisco. Con estos epísodios ya suman al menos 12 las instituciones educativas que recibieron este tipo de alarmas en lo que va del año, luego de que la semana pasada se diera la misma situación en los colegios Santa Rosa y Santa Catalina. Lamentablemente, parece haberse convertido en una dañiña tendencia en el ámbito escolar como modo de evitar éxamenes o bien, como una pésima broma que implica gastos de recursos innecesarios, genera pánico y constituye un delito configurado en el Código Penal.
Según trascendió, varios de los colegios tucumanos recibieron vía mail el mismo mensaje intimidatorio que ya habían recibido tiempo atrás instituciones educativas privadas en la Ciudad y la provincia de Buenos Aires.
El primero de los casos se dio en marzo, en el colegio Riverside School, ubicado en la localidad de Acassuso,
partido de San Isidro. En aquella ocasión, la brigada antiexplosivos de la
Policía Bonaerense descartó que hubiera artefactos o alguna bomba en el
inmueble y se determinó que un menor de 16 años fue el autor del
mensaje. A posterior, fue declarado inimputable por la Justicia por no comprender los actos que había realizado.
En mayo, casi una veintena de colegios privados de la Ciudad de Buenos Aires y el Conurbano también sufrieron amenazas de bomba con el llamativo mail que hace referencia a "La Masacre de Belgrado" y a tiroteos y episodios de violencia en diferentes escuelas del mundo.
“Siempre hemos esperado este día. La podredumbre viene literalmente de todas partes. Cada año hay muchos ataques a escuelas en todo el mundo, una respuesta a una sociedad podrida. Creado desde el nacimiento del hombre, la esencia misma del mal", comienza diciendo el escrito titulado "Hay artefactos explosivos en el edificio".
Y continúa: "La escuela hace esclavos perfectos. Intentaste hacernos tan insignificantes como tú. Siempre pensamos en el día en que decidimos salir de las sombras”.
Allí, el correo prosigue con el tiroteo ocurrido en Serbia el 3 de mayo pasado, donde un estudiante de 13 años asesinó a disparos a nueve personas e hirió a otras 12 con un rifle automático en una escuela del pueblo de Dubona, en la región de Mladenovac.
“Tras conocer el tiroteo en Belgrado, valiente guerrero de 13 años, el odio ya no se puede contener. Todo lo que sentirás antes de morir son fragmentos que perforan tu cuerpo", dice.
"El olor de las balas de plomo que te dispararon. El sonido de un disparo será una larga vida para ti. Te quemaremos en queroseno. Ahogados en sangre. Somos su comienzo, tu doloroso final”, concluye el intimidante mensaje, el cual se cree que podría haber sido escrito con la herramienta de inteligencia artificial ChatGPT, aunque también se sospecha que podría haber sido copiado de un foro o blog en donde los adolescentes influenciados por los atentados en todo el mundo comparten información.
A partir de esos episodios, la Justicia bonaerense rastreó que el texto que se utilizó podría haber tenido origen en la India, por lo que se solicitó la intervención de Interpol para avanzar con la investigación sobre las amenazas de bomba. Tal parece que un mensaje idéntico llegó a principios de año a la Escuela Internacional Ebenezer, en Bangalore, al sur de la India, y que podría tratarse de la primera vez que se empleó el mensaje.