El Gobierno nacional definió recientemente por decreto el valor del Salario Mínimo, Vital y Móvil (SMVM) luego de que representantes de entidades empresarias y sindicatos no llegaron a un acuerdo en el último encuentro del Consejo Nacional del Empleo, la Productividad y el Salario Mínimo, Vital y Móvil.
De acuerdo con el decreto publicado en el Boletín Oficial, desde el 1º de julio el salario mínimo se ubica en $254.231,91, lo que representa una caída de más del 30% real (es decir, considerando el efecto de la inflación) con respecto a igual mes del año pasado, mientras que acumula una caída de más de 26% desde noviembre de 2023, último mes previo a la asunción de Javier Milei (La Libertad Avanza) como presidente.
El SMVM está garantizado por el artículo 14 bis de la Constitución Nacional y fue reglamentado por la Ley de Contrato de Trabajo, que define al salario mínimo como el piso de ingresos que puede percibir un empleado como retribución por su trabajo. La ley también establece que el SMVM no puede embargarse, salvo por deudas alimentarias.
Por su parte, el Convenio 131 de la Organización Internacional del Trabajo (OIT), señalar que a la hora de definir los montos del SMVM se deben tener en cuenta las necesidades de los trabajadores y de sus familias, al igual que factores como los requerimientos del desarrollo económico, niveles de productividad y alcanzar altos niveles de empleo.
Pero el salario mínimo también define el valor de otras prestaciones, como algunos programas sociales y, en algunos casos, el valor de la cuota alimentaria para padres separados.
Por ejemplo, los beneficiarios del programa Potenciar Trabajo cobraban el equivalente al 50% del SMVM, aunque con su reemplazo por otros 2 programas esto se modificó por un monto fijo de $78 mil. En otros casos, el salario mínimo sirve como tope para determinar el derecho o no a cobrar el beneficio, como el caso de las Becas Progresar, del que quedan excluidos los estudiantes cuyas familias tengan ingresos por más de 3 SMVM.
Como el sueldo básico actualmente se ubica en los $254.231,91, esto significa que los hijos de familias que cobren en conjunto más de $762.695,73 no podrán recibir el beneficio. Se trata de una cifra irrisoria si se toma en cuenta que para no ser pobre la misma familia necesitó en julio $900.647.
La postura del gobierno es aún más alarmante si uno considera que el SMVM surgió con la idea de que los trabajadores que menos cobran en Argentina tengan satisfechas sus necesidades económicas básicas, lo que equivale a decir que cuanto menos cubran la Canasta Básica Total por adulto equivalente. En el caso de familias tipo, la idea es que la sumatoria de 2 salarios mínimos (considerando una familia en la que los dos adultos trabajen) logren cubrir la CBT para una familia de 4 personas, con 2 menores en ella.
Desde que asumió Milei, el valor del poder de compra del SMVM se fue perdiendo cada mes de una manera calamitosa, al punto de que en julio quedó unos $37.241 por debajo de la CBT individual ($291.472). En ese mismo mes, para que 2 adultos que trabajan alcancen a cubrir las necesidades básicas de su familia, necesitaron ganar más de $450.000 cada uno. Eso significa que el SMVM que definió el gobierno para congraciarse con el sector empresarial quedó casi $200.000 por debajo de esta cifra.
En su resolución 13/2024, el gobierno definió las actualizaciones que sufrirá el SMVM hasta el décimo mes del año, pasando a $262.432, $268.056 y $271.571 en agosto, septiembre y octubre, respectivamente. Es decir, cuando las subas se terminen de consumar, un salario mínimo quedará todavía por debajo de la CBT de julio por unos $19.901.