Este viernes se realizó la última jornada del debate oral y público por el asesinato de la menor Luján Nieva (de 11 años), ocurrido el 25 de agosto del año pasado en la localidad de Río Seco. En representación de la Unidad Fiscal de Delitos contra la Integridad Física de Monteros, que subroga Diego López Ávila, el auxiliar de fiscal, César Larry, expuso su alegato de cierre y la pretensión punitiva (prisión perpetua) contra Walter Mateo Córdoba, tío de la víctima e imputado como autor de los delitos de homicidio triplemente agravado, privación ilegítima de la libertad y abuso sexual con acceso carnal, todos en concurso real.

Previamente, el acusado dijo las siguientes palabras: “Yo le he pegado con el ladrillo su señoría (al dirigirse hacia el tribunal) y no sé qué me pasó por la cabeza al quemar el cuerpo. Perdón a la familia”.

Según sus dichos descartó haber cometido el abuso y comentó que se encontraba construyendo una chimenea-hogar cuando arrojó el elemento desde el fondo hacia el frente del domicilio.

Al exponer, Larry fue contundente y remarcó contradicciones sobre todo por el material científico reunido como prueba (ADN e informe del arqueólogo forense, entre otros).

“La abusó sexualmente y la mató con un ladrillo pero no tirándolo sin querer sino arrojándolo hacia la nuca (se encontró ADN de la menor en el elemento). Como rápidamente tenía que ocultar lo que hizo, la llevó al fondo de la casa y prendió fuego el cuerpo (previamente lo desmembró)”, indicó el Auxiliar de Fiscal.

Finalmente, el tribunal pasó a un cuarto intermedio hasta el próximo lunes cuando tendrán lugar las palabras finales y la sentencia.

La teoría del caso

El hecho ocurrió el 25 de agosto de 2024 en la localidad de Río Seco. En horas del mediodía, Luján desapareció luego de salir de su casa, en el barrio Virgen del Rosario, rumbo a una despensa cercana.

Según la acusación, en el trayecto pasó por el domicilio de Walter Mateo Córdoba y preguntó por la hija de éste quien, aprovechándose de la relación de cercanía que mantenía con la menor, la hizo ingresar a su domicilio donde la atacó sexualmente.

Luego, con un ladrillo le propinó golpes que le produjeron la muerte. Tras ello, con el objetivo de ocultar el cuerpo, lo llevó para la parte trasera de su inmueble y lo prendió fuego. Al ver que no podía quemar el cuerpo en su totalidad, segmentó el cadáver y colocó las vísceras de la niña en un tacho para luego cubrirlas con tierra y una planta./MPF