En poco más de 72 horas, el espacio conducido por el ex intendente de Concepción, Roberto Sánchez, pasó de festejar la unidad a perder a dos alfiles importantes dentro del armado de la Unión Cívica Radical.
Primero fue el intendente de Bella Vista, Sebastián Salazar,
quien pegó el portazo tras confirmarse la incorporación a la lista única del
exlegislador y referente del ENARGAS, Ariel García. “Se notó mucho el
individualismo de algunos dirigentes y no me siento representado. Necesitamos
un radicalismo que aporte en esa construcción plural y profundamente
democrática que es y debe seguir siendo Juntos por el Cambio en la provincia",
señaló en el documento que giró a la Junta Electoral partidaria.
Este martes, por su parte, el concejal y ex interventor de
la UCR, José “Lucho” Argañaraz, también presentó su renuncia y dejó de formar
parte del armado político de Sánchez y compañía. "En nuestro partido
siempre nos guiamos por valores de la democracia y la institucionalidad,
creemos en el diálogo y en la construcción partidaria con todos los sectores.
Venimos trabajando hace meses por la unidad para llegar fuertes a 2023, por el
futuro de Juntos por el Cambio y de Tucumán. Sin embargo, han ocurrido sucesos
con los que no estamos de acuerdo. No estamos de acuerdo con los arreglos
verticalistas (ni) con la censura. No apoyamos la exclusión de ningún
militante", puntualizó Argañaraz, quien renuncia, concretamente, a
integrar la Junta de Gobierno de la lista.
"Renuncio porque hay que mantener coherencia. No puedo
estar sentado en una mesa que no goza de la legitimación de todos los espacios
que forman el radicalismo, una mesa que se armó manteniendo algunos acuerdos,
pero excluyendo a la mayoría", añadió el concejal de la Capital.
Según Argañaraz, en la lista presentada el viernes -ya con
García incluido- se dieron algunas anomalías, como ser “espacios vacíos” y “gente
que no cumple los requisitos exigidos en nuestra carta orgánica”.
Antes que Argañaraz y Salazar, también había presentado su
renuncia el edil de Yerba Buena, Lisandro Argiró, quien había dimitido días
antes de que finalmente se conforme la lista cuestionada.
A pesar de todo, la Junta Electoral desestimó las impugnaciones presentadas en rechazo a la lista y Sánchez fue proclamado como el nuevo presidente de la UCR, cargo que asumirá cuando la conducción nacional del partido lo oficialice.
Como positivo, desde el espacio de Sanchéz destacan que en el proceso se evitó ir a elecciones, pero lejos están los correligionarios de alcanzar la unidad y el consenso que buscaban pensando en la posibilidad concreta de poder gobernar en 2023. Queda un largo camino por recorrer y varias heridas que cerrar para lograrlo.